Expertos consideran "adecuadas" las medidas de la xunta para retener la mancha de tóxicos del Umia

Actualizado: martes, 5 septiembre 2006 18:00

Cinco investigadores del CSIC y de la USC participan en los trabajos de recuperación de las aguas afectadas por un vertido

CALDAS DE REIS (PONTEVEDRA), 5 Sep. (EUROPA PRESS) -

El profesor e investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Joan Grimalt, consideró hoy positivas las distintas medidas llevadas a cabo por los técnicos de la Xunta de Galicia en el momento de producirse el desastre ecológico del río Umia, motivado por el incendio de un almacén químico en Caldas de Reis (Pontevedra)

Grimalt se trasladó hoy a Caldas en compañía de otros cuatro investigadores del CSIC y de la Universidad de Santiago de Compostela (USC), todos ellos ya habían participado en los planes de recuperación por otro vertido en Aznalcóllar.

El portavoz de estos "investigadores de élite" --como los definió hoy en una comparecencia pública el director xeral de Desenvolvemento Sostible de la Consellería de Medio Ambiente, Emilio Fernández--, resaltó positivamente "la rápida respuesta que ha habido ante este episodio comparado con otros anteriores ocurridos en España" y admitió que "les ha sorprendido favorablemente". Añadió que "las medidas que se han tomado les parecen adecuadas, aunque es un problema complicado por el uso de las aguas del río".

Según los investigadores del CSIC y de la USC, los compuestos que se han encontrado en el río, conllevan problemas, pero "como aspecto positivo" hasta dónde han podido comprobar por ahora, se pueden tratar y "este río no tiene por qué quedar contaminado en un futuro largo". "Son compuestos que se pueden eliminar", aseguró Grimalt.

El portavoz de los expertos explicó que en el río se encuentran dos grupos de productos, uno con el touleno o el xilenio, "que son un grupo de disolventes derivados del petróleo, muchos de ellos son habituales en la gasolina", y otro grupo de cloroformo "que son disolventes órgano-clorados". Sobre estos últimos compuestos, dijo que "son tóxicos pero son volátiles" y que, por ello, "su eliminación no es difícil".

A lo largo de estos días se han analizado las aguas del río Umia, y el investigador del CSIC apuntó que "sabemos que estos disolventes no tienden a bioacumularse, aunque en un momento determinado por la concentración, pueden haber causado un impacto inmediato en el sedimento". No obstante, añadió que "si no tienden a bioacumularse tampoco lo harán en el sedimento".

La presencia de metales como hierro y aluminio, de los que se han detectado niveles altos, explicarían la aparición de un PH bajo en el agua aunque, según matizó este experto, "son metales que en general están en cualquier río".

Para el investigador del CSIC, "no son compuestos muy permanentes y el hecho de que sean volátiles es una buena noticia". En esta misma línea, el director xeral de Desenvolvemento Sostible, Emilio Fernández, dijo que "no sorprende la presencia de este tipo de compuestos en el río "porque este tipo de actividad industrial, que no es más que un almacenador de productos químicos, su característica principal es una enorme diversidad de productos".

El alto cargo de la Consellería de Medio Ambiente sí reconoció que las cantidades vertidas no se conocen. "Sabemos las concentraciones de los tóxicos en el momento inicial, pero no sabemos la cantidad total de producto que se ha librado al río", declaró.

RECUPERACIÓN DEL RÍO

Según resumió Emilio Fernández, los esfuerzos se están concentrando en retener la carga contaminante con el objetivo de que no llegue a la captación de agua de O Salnés y a la ría de Arousa. "Una vez se tiene el agua retenida, se está efectuando la limpieza en las balsas a la que es desviado con compuestos como el carbono activo", añadió.

En esta línea, comentó que se están intensificando los análisis para evaluar cuál es la eficiencia de este proceso de descontaminación y que se sigue con los muestreos. "A la mínima sospecha de contaminación varios puntos arriba, y con un margen de más de un día, se cerraría la toma de O Salnés", dijo Emilio Fernández, aunque también aclaró que en estos momentos no existe en la zona de Baión ningún índice de contaminación.

El director xeral confirmó que el cauce de 5 ó 6 kilómetros desde el punto de vertido hasta la balsa instalada en la zona de As Aceñas "está seriamente dañado y la mortalidad es total". Puntualizó que es a partir de este momento cuando se tiene que emprender "un plan de actuación para recuperar ese cauce de río, algo que es complejo pero el personal reunido aquí tiene experiencia por haberlo hecho en otros lugares españoles".

La gran mancha se sitúa en estos momentos en el dique de As Aceñas en el que se activó el sistema de descontaminación forzada con carbono activo, "y se están oxigenando a su vez para que la superficie de contacto entre los contaminantes y este carbono sea la mayor posible", según Fernández. Los expertos avanzaron que hoy se activó un plan de recuperación del cauce del río Umia "porque quieren seguir trabajando en todas las líneas posibles y en el mismo sentido". El director xeral matizó que no hay fechas para constatar cuánto tiempo tardaría en regenerarse el río, pero cree "no debería ser sorprendente que nos encontrásemos con una recuperación relativamente rápida" debido a las características de algunos de estos productos.

A todos estos trabajos se añadirán ahora las analíticas que se van a realizar en todos los acuíferos próximos a la zona en la que se ha producido el vertido y al caudal del río afectado por el paso de este vertido. Todas estas analíticas, junto a las que se practiquen en el río se van a hacer públicas, según avanzó Fernández, quien dijo que aparecerán en la página web de la Xunta en las próximas horas.

OTRO VERTIDO

Durante la comparecencia pública de los investigadores y del alto cargo de Medio Ambiente, se confirmó que en las últimas horas en la misma zona se ha producido un nuevo vertido sobre el que ya se abrió la correspondiente investigación.

En este sentido, el director xeral de Desenvolvemento Sostible informó de que en esta madrugada se conoció "la existencia de un vertido y que el Seprona ya tomó muestras" para comprobar su origen y si guarda algún tipo de relación con el vertido de Brenntag.

Según Fernández, "va a ser fácil saber si ese vertido es similar al problema que nos encontramos, o es ajeno". Añadió que "con la potencia de análisis que hay este momento, no sería muy responsable que alguien aprovechase para hacer vertidos al río", porque se detectará de inmediato. Asimismo reiteró que existen "todas las líneas de control para detectar nuevos vertidos" y que se someterán a investigación.