Rechaza "políticas ficción y de humo" como "los mandilones identitarios" y aboga por "una Galicia que no se cierre en sí misma"
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
El presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, tachó hoy a PSdeG y BNG de "conservadores" al atribuirles la defensa de ideologías propias "del siglo XIX". "No nos vamos a resignar al inmovilismo, ellos quieren que todo se mantenga como en el siglo pasado", aseveró.
Para Feijóo, "el PP es la única alternativa a la crisis" y "no hay otra posibilidad para cambiar las recetas económicas y la política social" del Gobierno central, que "fracasan". Así, durante la reunión interparlamentaria celebrada en Santiago, reivindicó a la formación 'popular' como un "partido centrado, constitucional", que defiende un "galleguismo cordial" y "cree en la legitimidad de las instituciones".
El mandatario autonómico contrapuso todo esto con los partidos de la oposición en Galicia --PSdeG y BNG-- y apuntó que el PP "no gobierna instituciones que simultáneamente quiere disolver". "Por mucho abuso de poder, no pudieron destruir este pueblo", sentenció Núñez Feijóo y, en esta línea, criticó al anterior Ejecutivo bipartito por constituir, en su opinión, un "gobierno del despilfarro, dividido y que no salió de las urnas, sino de un despacho".
"Hace tan sólo unos meses se discutía --en la Comunidad gallega-- la adopción de un horario distinto al resto de España" y cuestiones como "los mandilones identitarios", censuró, por lo que rechazó "las políticas ficción y de humo" y abogó por "una Galicia que no se cierre en sí misma".
"MODERNIZAR E INNOVAR"
En este sentido, el jefe del Ejecutivo autonómico entendió que "la ciudadanía gallega no quiere renunciar a su pasado pero, sobre todo, lo que quiere son los cambios de la sociedad europea y mundial". "Para que Galicia no se cierre en sí misma como si fuera algo a preservar simplemente porque está anclada en el pasado", argumentó.
Así, vio que la comunidad tiene "cosas que preservar y otras que modernizar y que innovar". "Nosotros sabemos que estamos en el siglo XXI, no nos resignamos a un callejón sin salida que es la política económica del Partido Socialista", arengó, durante el discurso que cerró la reunión interparlamentaria del PP en Santiago de Compostela.
En esta línea, llamó la atención de los diputados, senadores y europarlamentarios que participaron en el encuentro sobre el inicio de "la segunda década del siglo XXI", que "empieza en 60 días" y "va a ser fundamental para el país".
Al respecto, apuntó a la "responsabilidad" de los 'populares' gallegos de "gobernar con los apoyos electorales del 1 de marzo" y aludió a "la próxima fiesta electoral", que vio en los comicios municipales de mayo de 2010.
"Tenemos que construir, no destruir; tenemos que resolver el montón de problemas que heredamos y no inventarlos", proclamó, para concluir que "un Gobierno que desvía la atención" sobre el "principal problema" --por la crisis económica-- "hay que cambiarlo".
