La Guardia Civil examina el entorno de la mujer hallada muerta en Bertamiráns y mantiene varias líneas de investigación

Europa Press Galicia
Actualizado: jueves, 7 septiembre 2006 17:12

Vecinos reconocen que escuchaban amenazas y gritos "continuos" dentro de la vivienda y que vieron a la víctima "con los ojos morados"

AMES (A CORUÑA), 7 (EUROPA PRESS)

La Guardia Civil examina el entorno más cercano de Mercedes F., la mujer de 55 años de edad que fue encontrada muerta en su cama el pasado 2 de septiembre en Bertamiráns, en el municipio coruñés de Ames, y mantiene abiertas varias líneas de investigación, por lo que no descarta ningúna hipótesis, según confirmaron a Europa Press fuentes policiales.

Aunque en un principio todo apuntaba a que se trataba de una muerte por causas naturales, la autopsia reveló la existencia de varios hematomas que podrían tener relación directa con la muerte de Mercedes F.. La víctima vivía en Bertamiráns --una localidad cercana a Santiago de Compostela-- con otra mujer, de 35 años de edad, que en las últimas horas fue interrogada y puesta en libertad, y con un hombre de mediana edad y dos niños menores.

Vecinos del número seis de la calle Pedregal de Bertamiráns que solicitaron preservar su anonimato, explicaron a Europa Press Televisión que las amenazas y los gritos eran "continuos" dentro del Bajo A, donde residía la víctima. Según relataron, estos gritos siempre tenían como protagonista al hombre que vivía con Mercedes y al que algún vecino reconoció tener "miedo".

"OJOS MORADOS"

Asimismo, en declaraciones a Europa Press Televisión, María Teresa Suárez, que posee una tienda de ropa junto a la vivienda de la víctima, dijo conocer a Mercedes, a la que definió como una persona "normal" y "muy educada", que a veces le llevaba algún trabajo y "que siempre pagaba puntualmente".

Sobre los comentarios que apuntan a una convivencia conflictiva dentro de la casa, María Teresa Suñarez dijo desconocer por completo cuál era la situación, aunque sí había escuchado rumores entre los vecinos. "Su vida dentro de casa no sé cómo era", aunque sí reconoció que la había visto "a veces con los ojos morados".

En cuanto a los dos niños menores que también vivían en la casa, María Teresa Suárez dijo que a veces pasaba bastante tiempo sin que se les viera, por lo que cree que sólo "estaban por temporadas".

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