El gobierno conmuta la pena de 3 años de prisión por detención ilegal por un año de cárcel y otros dos años de multa
MADRID/VIGO, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
Un constructor condenado en 2012 por agredir y retener a la arquitecta municipal de A Illa de Arousa (Pontevedra) ha recibido un indulto parcial del Gobierno, de manera que la pena de tres años de prisión por un delito de detención ilegal será conmutada por una pena de un año de cárcel y otros dos años de multa, con una cuota diaria de dos euros.
Este indulto es uno de los siete que publica este lunes el Boletín Oficial del Estado (BOE), donde el Ministerio de Justicia le conmuta a este constructor, Juan Manuel Chaves Daporta, la pena de prisión por el delito de detención ilegal al estimar que, en base a los informes del Tribunal sentenciador y del Ministerio Fiscal, "concurren razones de justicia y equidad".
El Juzgado lo Penal número uno de Pontevedra condenó el 7 de marzo de 2012 a Chaves Daporta por los delitos de detención ilegal --tres años de prisión--, atentado --un año de prisión-- y una falta de lesiones --multa de 180 euros-- contra la arquitecta municipal de la localidad pontevedresa. Además le condenó a indemnizar a la víctima en 1.404 euros.
Tal y como consta en la sentencia, el tribunal consideró probado que el 22 de marzo de 2010 el hombre "irrumpió" en el despacho de la arquitecta municipal del Ayuntamiento de A Illa de Arousa y, "con ánimo de privarla de su libertad deambulatoria, cerró con llave la puerta de la estancia y se la guardó en el bolsillo".
En el lugar, mantiene, el varón retuvo a la mujer alrededor de una hora --hasta que se presentó la Guardia Civil--, tiempo en el que "la levantó, la zarandeó, la empujó contra el mobiliario allí existente y le dio un golpe en la parte de atrás del hombro, al tiempo que le decía que la iba a matar a ella y a su hija, que era una hija de puta y que si no estuviera cerrada la ventana, la tiraba por ella".
El tribunal señala que "parece que la acción del acusado fue una respuesta a la venta frustrada de una vivienda" que se iba a consumar ante notario en la mañana de los hechos, pero que, según testigos, no tuvo lugar porque tras una consulta previa al Ayuntamiento, la arquitecta municipal comunicó que el "piso tenía una infracción", por lo que el comprador "dio marcha atrás".
VERSIÓN DEL CONSTRUCTOR
Por su parte, Chaves Daporta se defendió en su momento acusando al Ayuntamiento de A Illa de Arousa de "beneficiar a promotores afines". El constructor negó en un comunicado las amenazas y afirmó que acudió al despacho de la arquitecta para pedirle explicaciones porque "la compra de sus viviendas se malograba".
El constructor negó también la retención de la arquitecta durante una hora, asegurando que cerró la puerta del despacho ante la "presencia de numerosas personas, con el alcalde Manuel Vázquez a la cabeza, en tono muy agresivo y agitado".