Julián Barrio destaca "el derecho" de los padres a educar a sus hijos "conforme a sus principios morales y religiosos"

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 25 Jul. (EUROPA PRESS) -

El arzobispo de Santiago, Julián Barrio, reclamó hoy la libertad de los padres para elegir la educación de sus hijos y destacó "el derecho primario e insustituible" que les asiste para formar a sus descendientes "conforme a sus propios principios morales y religiosos".

En la homilía de respuesta a la intervención del presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, como delegado Regio, Barrio citó las palabras del Papa Benedicto XVI en su reciente visita a Valencia y subrayó el papel de la familia, "primera escuela de valores sociales, bien insustituible y lugar del primer anuncio de la fe para los hijos".

Barrio -que realizó la mitad de su intervención en castellano y la otra en gallego- pidió a los fieles laicos que se comprometan manifestando "una identidad clara y firme en medio de modelos de confusión, de pensamiento débil y de responsabilidad fragmentada". "Es urgente la presencia de fieles laicos que con fe viva y testimonio entusiasta hagan creíble a Dios en nuestra sociedad", añadió.

Así, ante los cambios que se están produciendo en la sociedad, el Arzobispo recordó la "urgente tarea evangelizadora de la Iglesia, que no es una simple comunidad humana depositaria del Evangelio o de los misterios divinos, sino ante todo una comunión de hijos de Dios que peregrinan hacia la ciudadanía de los santos".

En este contexto, se refirió de nuevo a las palabras del Papa que exhortaban a valorar la "profunda raigambre cristiana, que tanto ha aportado y está llamada a aportar al testimonio de la fe y a su difusión en otras muchas partes del mundo, manteniendo vivo y vigoroso este espíritu, que ha acompañado la vida de los españoles en su historia, para que siga nutriendo y dando vitalidad al alma".

El arzobispo de Santiago también solicitó que "el deseo de paz y de una convivencia fraterna se haga realidad en todo el mundo, de manera especial en la tierra del Apóstol".

MEMORIA DE SANTIAGO

Monseñor Julián Barrio acogió la Ofrenda Nacional recordando "la transmisión de la fe en América y que Europa se fue haciendo alrededor de la memoria de Santiago" y encomendó a la intercesión del Apóstol "a todos los pueblos de España, en especial al gallego".

El arzobispo de Compostela pidió por los gobernantes "para que fortalezcan los derechos fundamentales de la persona y respondan a los imperativos del bien común", por "la paz y la convivencia fraterna" y solicitó "protección" para la Iglesia española, toda la Familia Real y el señor oferente, su familia y sus colaboradores.

Concelebraron con Julián Barrio el Cardenal Arzobispo de Sevilla, Carlos Amigo; el Arzobispo Castrense, Francisco Pérez; los cinco Obispos gallegos, José Cerviño (emérito de Tui-Vigo); José Diéguez Reboredo (Tui-Vigo); José Gómez (Lugo); Luis Quinteiro (Ourense) y Manuel Sánchez Monge (Mondoñedo-Ferrol); el Cabildo de la Catedral, los Vicarios y delegados diocesanos, los formadores de los Seminarios Mayor y Menor y varios sacerdotes de diferentes diócesis españolas.