La CECE anuncia una nueva manifestación contra la ley el próximo 1 de abril en Madrid
VIGO, 31 Ene. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Confederación Española de Centros de Enseñanza (CECE), Isabel Bazo, advirtió hoy de que la organización que preside "llegará hasta el final" y acudirá, si es preciso, al Tribunal Constitucional, si la Ley Orgánica de la Educación (LOE) progresa tal y como está concebida en la actualidad.
Bazo, que presentó hoy en Vigo la campaña de CECE contra la actual LOE, explicó que, una vez que la ley fue aprobada a mediados de diciembre, la confederación presentó hasta 81 enmiendas (que se suman a las 98 presentadas antes de esa aprobación inicial), lo que refleja que "la ley sigue siendo mala", por eso anunció que las asociaciones de enseñanza contrarias se manifestarán de nuevo en Madrid el próximo 1 de abril.
La presidenta de la CECE aseguró que el Gobierno había actuado sólo con criterios políticos a la hora de elaborar esta norma, puesto que, según Bazo, "sólo se quiso tirar abajo la ley anterior hecha por otro partido", y advirtió de que no se ha tenido en cuenta la situación educativa de España en relación con otros países de la UE, que se recoge en documentos como el 'informe Pisa' y que para la Confederación de Centros de Enseñanza es "muy lamentable".
Asimismo, criticó que la ley ofrezca una "lectura sesgada" del derecho a la educación que se recoge en el texto constitucional, y pidió al gobierno que no provoque confusión, dando a entender que la enseñanza privada concertada está satisfecha con la LOE.
LEY DEL FRACASO ESCOLAR
Isabel Bazo explicó que la LOE, a medida que ha ido pasando por diferentes organismos, no ha hecho más que empeorar, por ese motivo, considera que esta ley "debería llamarse LOFE, Ley Orgánica del Fracaso Escolar, porque el fracaso escolar está asegurado".
Por otra parte, destacó que la norma no apoya a los profesores, y plantea su figura "como si fueran enemigos de los alumnos", además de que, según la CECE, no se garantiza la libertad de las familias para poder elegir un centro educativo para sus hijos, ya que se prima la inversión o el aumento de plazas en centros públicos.
