Más de 160.000 gallegos de 24 municipios cambiaron de alcalde en el ecuador del mandato

Archivo - Votaciones. Elecciones municipales y europeas del 26 de mayo de 2019. Papeletas. Colegio CEIP Cruceiro de Canido de Ferrol (A Coruña)
Archivo - Votaciones. Elecciones municipales y europeas del 26 de mayo de 2019. Papeletas. Colegio CEIP Cruceiro de Canido de Ferrol (A Coruña) - EUROPA PRESS - Archivo
Publicado: sábado, 22 mayo 2021 11:34

   Los cambios llegaron a raíz de cinco mociones de censura que salieron adelante, pero también por varias renuncias y fallecimientos

   SANTIAGO DE COMPOSTELA, 22 May. (EUROPA PRESS) -

   Más de 160.000 gallegos que viven en 24 de los 313 municipios de la Comunidad cambiaron de alcalde desde las elecciones celebradas el 26 de mayo de 2019 y a las puertas de sobrepasar el ecuador de mandato, lo que formalmente sucederá el 15 de junio, fecha en la que constituyeron las corporaciones locales dos años atrás.

   Los cambios de regidor registrados llegaron por la vía de la moción de censura (cinco exitosas), pero también hubo renuncias por motivos políticos u otras razones --entre las más recientes está la de José Miñones en Ames (A Coruña) para asumir la Delegación del Gobierno--, así como fallecimientos.

   De hecho, Baralla (Lugo) vivió uno de los primeros cambios de regidor al asumir el bastón de mando Miguel González (PP), hijo de Manuel González Capón. Su padre había renunciado a la Alcaldía de la localidad apenas 15 días después de tomar posesión y falleció tres días después de dar este paso debido a una enfermedad que padecía.

   Lugo es, en todo caso, la provincia en la que menor número de municipios cambiaron de regidor en este periodo. De hecho, solo lo hicieron tres que suman menos de 10.000 habitantes: Baralla, Mondoñedo y Monterroso. Cada una de las otras tres provincias acumula siete cambios de regidor en los últimos dos años.

   La calma política en Lugo no se vio empañada por ninguna moción de censura y, al margen del caso de Baralla, fue la ahora diputada y presidenta provincial del PP, Elena Candia, la que agitó la vida política lucense al dejar el bastón de mando en manos de Manuel Otero para acompañar a Alberto Núñez Feijóo en las listas de las últimas autonómicas.

   Más allá, las crisis de gobierno registradas en Monterroso acabaron cuando Rocío Seijas, de Independientes por Monterroso (IxM), sustituyó a finales de julio del año pasado en la Alcaldía a Antonio Gato.

MOCIONES Y RENUNCIAS EN A CORUÑA

   En A Coruña, los más de 71.000 vecinos de siete municipios cambiaron de regidor desde mayo de 2019. En dos, el cambio llegó al prosperar una moción de censura: Fene y Mugardos. A principios de este mes, ediles no adscritos con el apoyo de PP y APIN intentaron también impulsar una moción de censura en Ponteceso, pero la frenó la ley antitransfuguismo y el regidor, Lois García Carballido, mantiene el bastón de mando.

   Otros cuatro cambios en A Coruña se produjeron tras las renuncias de regidores por diversos motivos. Así, Blas García fue elegido alcalde de Ames el mes pasado tras ponerse Miñones al frente de la Delegación del Gobierno. Poco después, Manuel Mirás, alcalde de Oroso renunció y dejó el bastón de mando al también socialista Luis Rey, aunque aseguró que seguiría en política.

   Por motivos personales renunció en su día y tras 41 años en el cargo el regidor de Brión, José Luis García, cuyo cargo asumió su hasta entonces número dos, Pablo Lago. Mientras, Juan Manuel Rodríguez sustituyó en 2020 en la Alcaldía de Cerceda a José García Liñares, quien gobernó el municipio durante casi 25 años, y dimitió tras ser inhabilitado por un delito de prevaricación administrativa.

   Finalmente, en Mañón asumió la Alcaldía el pasado mes de febrero el popular Alfredo Dovale tras el fallecimiento por enfermedad de Alfonso Balseiro.

TRES MOCIONES EN OURENSE

   En estos dos años, además, casi 14.500 vecinos de siete ayuntamientos de Ourense han visto como sus alcaldías han cambiado de dirigentes por distintos motivos. El primero de estos cambios tuvo lugar en O Irixo, donde Manuel Cerdeira ocupó la Alcaldía tras el fallecimiento del que fuera regidor durante más de 30 décadas, Manuel Penedo.

   Tras la cita con las urnas de mayo de 2019, en Laza un pacto entre el PSOE y Xuntos por Laza permitió la investidura del socialista Jesús Blanco. Sin embargo, tras un año de mandato optó por presentar su renuncia acusando a sus socios de "obstruccionismo". Con su marcha, el PP recuperó el bastón de mando, que vuelve a ostentar José Ramón Barreal.

   En este tiempo, salieron adelante tres mociones de censura en esta provincia. En concreto, en Castrelo de Miño, el popular Avelino Pazos logró hacerse con la Alcaldía tras un pacto con dos exconcejales del PSOE, un acuerdo que apartó al regidor del BNG, Esteban Suárez. Por su parte, en Ribadavia, la socialista Noelia Rodríguez se convirtió el alcaldesa al apoyar Ribeiro en Común una moción contra el popular César Fernández.

   Además, los vecinos de Viana do Bolo verán pasar hasta tres alcaldes por la Casa Consistorial en este mandato. Si bien tras las elecciones un pacto entre BNG y PSOE posibilitó la investidura del nacionalista Secundino Fernández, dos de los concejales socialistas abandonaron el PSOE para pactar una moción de censura. El acuerdo incluye que el actual alcalde Abelardo Carballo --exsocialista-- y el popular Andrés Montesinos se repartan la Alcaldía.

   Por su parte, en San Amaro (Ourense), la socialista María del Carmen Pérez Corral presentó su dimisión por razones personales, lo que dio lugar a que el también socialista Rubén Gómez fuese investido alcalde. Queda por ver si los socialistas y Xuntos por San Amaro cumplirán el acuerdo por el que también se prevé que próximamente se turnen el bastón de mando.

   Además, la elaboración de la candidatura ourensana del PP para las elecciones autonómicas del pasado año provocó cambios de alcalde en dos localidades de la provincia: Bande y Cenlle.

PROVINCIA DE PONTEVEDRA

   En Pontevedra, se han producido cambios en las alcaldías de siete ayuntamientos que suman una población total de más de 66.000 habitantes. En Cangas, la muerte de Xosé Manuel Pazos motivó que accediese a la Alcaldía Victoria Portas, también de Alternativa Canguesa de Esquerdas (ACE). Además, una enfermedad apartó del cargo al regidor de Ponteareas, Xosé Represesas (BNG) por lo que la primera teniente de alcalde, Cristina Fernández, ejerce en funciones el mando.

   También dimitió por consejo médico el regidor de Dozón, el popular Adolfo Campos, quien tras 33 años en la Alcaldía fue relevado en el cargo por su hijo, Adolfo Campos Vázquez. Por su parte, en agosto de 2020, el socialista Francisco Costa anunció que presentaba por motivos personales su renuncia como alcalde de Vilaboa, un cargo que pasó a ocupar César Poza, también del PSOE.

   También un año después de los comicios, el que fuera alcalde socialista de Catoira (Pontevedra) Alberto García recuperó la Alcaldía pese al fracaso de una moción de censura presentada después de un acuerdo de su grupo con el PP local contra el regidor del Bloque Xoan Castaños.

   El nombramiento de la alcaldesa de Moraña, Luisa Piñeiro, como delegada de la Xunta en la provincia motivó un cambio en la alcaldía de este municipio. Con todo, tras ser condenada por prevaricación y fraude en relación a unas obras en un campo de fútbol tuvo que presentar su dimisión. Con su marcha, el Gobierno gallego volvió a optar por otro alcalde para el cargo, en este caso el de Rodeiro Luis López, quien también tuvo que dejar el bastón de mando en otro compañero de filas.

A LAS PUERTAS DE ROTAR DE ALCALDE

   Con la llegada del ecuador del mandato, en seis ayuntamientos gallegos cobran protagonismo los acuerdos para cambiar de regidor en los próximos días. En Toques y Salceda de Caselas no se auguran problemas para el cambio, pero la situación es distinta en Santa Comba --donde los problemas entre los socios empezaron casi desde el principio y el conflicto está en un punto álgido--.

   Queda por ver también si el acuerdo se cumplirá en San Amaro y Viana do Bolo (Ourense). Además, en Vila de Cruces, ni siquiera hay consenso en que el pacto --del que no hay nada por escrito-- hubiera llegado a producirse alguna vez.