A CORUÑA, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Numerosos jóvenes secundaron ayer en A Coruña la cita para un macrobotellón, convocado a través de mensajes por Internet y también mediante el teléfono móvil. A falta de datos oficiales, se calcula que más de mil personas asistieron al evento, convocado en la plaza del Humor, a partir de las 23.30 horas, sin que se registrasen incidentes, según confirmó a Europa Press la Policía Local.
A las 23.30 horas había ya en la plaza más gente de lo habitual que otra noche de sábado, de acuerdo con las estimaciones de algunos de los asistentes y de los propios vecinos, pero la presencia de jóvenes fue aumentando a partir de las 00.00 horas. Beatriz Rodríguez, vecina de la zona, aseguró a Europa Press que sobre las 23.30 horas "la plaza estaba casi llena y había mucha avalancha de gente por las calles próximas".
El Ayuntamiento de A Coruña reforzó la presencia policial y también la Cruz Roja intensificó la colaboración que mantiene habitualmente con el Consistorio durante los fines de semana con la ubicación de ambulancias en las calles donde se concentra el ocio ante la previsión de alguna incidencia. Lo mismo se hizo con el dispositivo de limpieza para retirar los desperdicios que generan este tipo de eventos.
Beatriz Rodríguez indicó que en verano la aglomeración de gente en la plaza donde ayer se convocó el macrobotellón "es muy similar, más los sábados que los viernes", matizó, y aseguró que los vecinos de la zona no pueden dormir porque también hay concentraciones de jóvenes ante el Teatro Rosalía de Castro.
"Están hasta las 3.30 o 4.30 horas de la mañana y lo habitual es que hasta las 6.00 horas no puedas dormir", explicó esta vecina que vive en la calle de la Franja. Aseguró también que ante la imposibilidad de poder descansar "los vecinos que tienen la posibilidad se marchan los fines de semana fuera". Otros recurren a pastillas para poder conciliar el sueño o regresan tarde a sus casas.
"La contaminación acústica es terrible", afirmó Beatriz Rodríguez, quien explicó que a este problema se suma "la suciedad con la calle orinada y con restos de vasos de papel", añadió. "Nadie dice que la gente joven no tiene que divertirse, pero algo tiene que pasar para que esto no siga sucediendo", insistió esta afectada.
