Medio Rural reduce a la mitad las zonas que cuentan con especial vigilancia para evitar incendios, al pasar de 525 a 256

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Consellería de Medio Rural ha decidido reducir a más de la mitad las parroquias gallegas que contarán con una especial vigilancia en materia antiincendios. Así, si hasta el momento eran 525 las que contaban con una mayor dotación de agentes forestales y de vigilancia policial, en esta campaña serán un total de 256.

Así lo anunció tras la reunión del Comité de coordinación Policial anti-incendios el director xeral de Montes, Alberte Blanco, quien justificó esta reducción con respecto a lo establecido por el anterior Gobierno, porque se comprobó que había parroquias bajo especial vigilancia y que "no contaban con ningún tipo de riesgo" en materia de incendios, "tal y como lo demostró el nulo número de fuegos durante los últimos años".

Blanco recordó que las parroquias o zonas de especial vigilancia son aquellas en las que estadísticamente y de forma sistemática se ha comprobado que concentran el mayor número de incendios. Por estos motivos, la vigilancia de agentes forestales y policiales es mayor en estos territorios.

"Se trata de optimizar y racionalizar los recursos, ya que sólo el 11% del territorio gallego registra el 40% de los incendios", argumentó Blanco para justificar esta reducción. Además, destacó que, entre estas 256 parroquias, se incluyen zonas en la que sí se había demostrado una importante incidencia --en términos estadísticos-- de incendios y que no estaban incluidos en esta protección especial.

Así, puso como ejemplo el caso de la provincia de Lugo donde tan sólo dos zonas contaban con esta especial vigilancia y ahora pasan a ser 46, "se trata de un incremento notable", subrayó. En la provincia de Ourense, donde se concentran el mayor número de incendios todos los años, es donde más parroquias contarán con vigilancia especial, un total de 76; seguida muy de cerca por Pontevedra, con 70; y A Coruña, con 64.

Estas 246 parroquias contará con una mayor presencia de agentes forestales y de cuerpos de seguridad. "Eso sí sin solapamiento en la asignación de zonas", advirtió Alberte Blanco, quien precisó que en cada zona de especial vigilancia sólo habrá un cuerpo de seguridad de los tres que colaboran: Policía Nacional y Autonómica y Guardia Civil.

CASUISTICAS COMUNES

En el caso de estas 256 parroquias, la casuística de los incendios forestales que ha llevado a que formen parte de esta especial vigilancia suele coincidir. Así, generalmente son zonas en las que se producen sistemáticamente quemas incontroladas, cuentan con actividad cinegética o existen problemas entre comuneros y ganaderos por el pastoreo libre.

El director xeral de Montes descartó intereses urbanísticos y de recalificación en el origen de estos incendios. Así, apuntó que, si en el resto del Estado sí es "importante" el número de fuegos provocados con este fin, en el caso de Galicia "ni son los más relevantes ni los más numerosos".

CAMARAS TERMOGRAFICAS

Otra de las novedades en el dispositivo de lucha contra incendios con las que contará Medio Rural en la campaña de máximo riesgo, en los meses de verano, serán la instalación de cámaras termográficas, que son las que utiliza el ejército.

Blanco destacó la "máxima fiabilidad" de estas cámaras, que tienen un radio de actuación de 300 kilómetros y son capaces de detectar un incendio de un metro cuadrado a una distancia de 10 kilómetros.

No obstante, reconoció que se está perfeccionando la implantación de su software, ya que registra dificultades a la hora de distinguir el calor que irradia un coche o un animal. Sin embargo, garantizó que este verano ya habrá cámaras instaladas, aunque no precisó el número. La intención de Medio Rural es empezar con cinco hasta alcanzar un "número razonable".

USO DE NUEVAS TECNOLOGIAS

Asimismo, la consellería que dirige Alfredo Suárez Canal dispondrá este año de medios tecnológicos "avanzados". Así, se contará con medios electrónicos de vigilancia. El objetivo que persigue Medio Rural es que los agentes forestales y policiales cuenten "con todos los medios para determinar con fiabilidad las causas de los incendios y que permitan de este modo localizar a los culpables".

De igual forma, también se mejorarán los soportes informáticos para tener información en "tiempo real" de cada uno de los 18 distritos forestales, que cuentan con sus respectivas brigadas antiincendios, conformadas por 38 agentes forestales.

Blanco reconoció que el sistema con el que se trabajaba en la actualidad no posibilitaba a la Dirección Xeral de Montes conocer un incendio en el mismo momento en que los agentes forestales lo localizaban, "contábamos con un retraso de información de seis horas".

No obstante, destacó que con la informatización que se llevará a cabo en esta campaña se conocerá 'on-line' el incendio que se está registrando, con lo que "se podrá desplegar de forma más rápida e inmediata todos los medios al lugar".

Asimismo, también se reformarán los centros de coordinación provinciales y el central. "Mejoramos enormemente la seguridad con relación a años anteriores", acabó sentenciando Alberte Blanco.

EJERCITO

En cuanto a la presencia del Ejército en en esta campaña de verano de lucha contra incendios, Blanco consideró que los cuerpos policiales son "más adecuados" para este tipo de actuaciones tanto para el tipo de investigación que se requiere, como el trabajo en el medio rural.

De este modo, reconoció que el Ejército no es el efectivo "más adecuado" para este tipo de actuaciones por el "carácter orográfico" en el que deben trabajar, como por las "tipología de las unidades" que suelen enviarse para estas misiones.

No obstante, no descartó recurrir a este cuerpo militar para cuestiones "concretas" y así apuntó al hecho de que se lleguen a producir situaciones de emergencia.