VILAGARCÍA DE AROUSA 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
El proyecto de reforma integral de la Praza de Abastos de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra), que ya ha sido presentado por Mercasa a representantes de los distintos grupos políticos y de los comerciantes, propone una renovación tanto de la plaza como de su entorno mediante.
Se trata de un proyecto que no es para el presente, para solucionar problemas puntuales, según el Gobierno local de Vilagarcía, "si no de futuro, en el que el mercado tiene que ser el complemento de la Praza de Abastos y no al revés".
Esta es la principal conclusión planteada por el Gobierno local y los técnicos de Mercasa a los comerciantes de la plaza que han podido conocer de cerca las previsiones de actuación en esta zona.
La intención de los técnicos es volver a mantener un nuevo encuentro con los representantes de los comerciantes, y las previsiones que se manejan es que a mediados del mes de abril cada grupo o colectivo implicado en este proyecto haya decidido si apuesta por él o, de lo contrario, se deja que la plaza siga funcionando como hasta ahora.
Así, el Gobierno local de Vilagarcía de Arousa calificó el proyecto de "muy positivo" y se destaca su importancia en base a que se pretende que la reforma de esta plaza de abastos se integre dentro del Plan Nacional de Modernización desarrollado por Mercasa, y se consiga la implicación de todas las instituciones pertinentes, en el desarrollo de este proyecto de reforma.
Con un presupuesto de entre 7 y 8 millones de euros, la Praza de Abastos de Vilagarcía sufriría una transformación radical con aparcamientos subterráneos, nuevos locales comerciales y otros servicios. Lo que se pretende, según explicó Roberto Alonso, técnico responsable el proyecto "es rentabilizar el formato de proximidad".
Para ejecutar la modernización de la plaza, Mercasa propone la reforma integral do edificio, respetando su arquitectura original pero introduciendo nuevas tecnologías y favoreciendo la comunicación entre las distintas plantas.
ESTUDIO
Para la elaboración de este proyecto, los técnicos realizaron un estudio "in situ" con encuestas entre usuarios y comerciantes, llegando a la conclusión de que, por ejemplo, semanalmente, la plaza recibe unos 4200 clientes, es decir, 215.000 al año.
Los vilagarcianos, según este estudio, gastan unos 18 millones de euros al año en alimentación fresca, que si se une al resto de alimentación y bebidas, llega a los 48 millones.
La cota de mercado de la plaza es de sólo un 39% en alimentación fresca y de 17% en el resto de la alimentación y bebidas. Estas cifras, según Mercasa, son "claramente superables", lo que beneficiará a los vendedores, pero también a los compradores.
Una prueba de la actual deficiente explotación de la plaza, es según este estudio, que existen 108 unidades de negocio (el 60% de ellas de pescadería) que sólo ocupan 636 metros cuadrados, con un volumen de facturación de 8,5 millones de euros.