Una ourensana acusada de intoxicar a su marido declara que la "humillaba"

Actualizado: miércoles, 11 febrero 2015 18:03

La víctima, tras estar en la UCI por intoxicación, "sospechó" y en casa sólo "ingería la comida que primero comía ella"

   OURENSE, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -

   La mujer acusada de intoxicar a su marido con medicamentos antidepresivos y sedantes en Ourense ha admitido este miércoles que él la "humillaba" y "menospreciaba" delante de sus hijas, pero ha negado que hubiese planeado matarle, según declaró durante el interrogatorio del fiscal.

   El juicio que ha sentado en el banquillo a María José G.P., de 40 años y vecina de Vilamarín, comenzó en la Audiencia Provincial con su declaración, la de su víctima y ya exmarido, un vecino, una docena de médicos que atendieron al hombre durante su ingreso hospitalario en 2013 o en su centro de salud y los tíos de la víctima, que fueron a verle a casa el día que fue trasladado en ambulancia al Complexo Universitario Hospitalario de Ourense (CHUO).

   Durante el interrogatorio del fiscal, la acusada ha negado ser la autora de un intento de asesinato a su marido con medicamentos en bebidas y comidas, ni del maltrato familiar que se le atribuye por un episodio ocurrido en su casa dos meses después de que el hombre se recuperase de un coma y parada cardíaca por intoxicación en el hospital.

   Según la acusada, su marido trabajaba en la construcción en Lalín y seguía "a veces" una dieta porque tenía el colesterol alto, así que tomaba purés de sobre y leche de una marca determinada, que ni ella ni sus dos hijas consumían nunca. "El día 7 de enero de 2013 le preparé un puré que dijo que sabía muy amargo, así que le dije que lo dejara, y lo echamos a los perros al acabar", según ha relatado.

   "Luego comió chorizo con pan y tomó leche, pero dijo que también le sabía amarga", según ha explicado en la Audiencia Provincial. Tras la cena, Manuel R.A. se fue a cama sobre las 21,00 horas y al día siguiente no fue a trabajar porque "estaba mareado, pero no quiso ir al médico", según asegura la acusada. A mediodía ella se fue a buscar a la médico de familia "porque el centro de salud siempre comunicaba" y ésta pidió el traslado en ambulancia a urgencias a Ourense.

   La mujer relató que se llevó para el hospital los medicamentos antidepresivos y ansiolíticos que ella tomaba hacía tiempo, y al tercer día de estar allí, su marido ya estaba bastante mejor. Ella le daba a su esposo el agua de la fuente del pasillo del CHUO y las comidas, hasta que las pudo tomar por sí mismo, pero que en la mañana del día 13 lo encontró en la cama del hospital, al regresar de desayunar, "inconsciente y sin reaccionar".

PLAN

   La procesada ha explicado, a preguntas del fiscal, que, tras volver a casa desde el hospital el día 31 de enero de 2013, su marido volvió a estar mal el 10 de marzo. "Ya estaba en cama y tuvo convulsiones y se desmayó, así que pedí ayuda a un vecino que le metió un peine en la boca porque se tragaba la lengua, llamé a una ambulancia y les expliqué que se pudo dar un golpe contra el radiador de hierro que hay al lado de la cama", ha señalado.

   Tras el relato, el fiscal reiteró afirmaciones sobre "un plan para matar a su marido", a lo que la acusada respondió que eso "es mentira".

   Finalmente, la mujer rompió a llorar mientras el fiscal aludió a la relación con su marido, en la que él "la humillaba y menospreciaba delante de sus hijas", algo que ella negó primero con la cabeza y admitió después, pero negó la siguientes afirmaciones de la acusación pública sobre la introducción de medicamentos en lo que él bebía y comía y que ella "reiterase" esa acción en el hospital "tras no causar el efecto esperado el día 7, en la primera ocasión".

   En su declaración, la acusada incluyó en varias ocasiones, alusiones a sus medicinas entre las que se encuentra el Tranxilium, aunque no supo detallar todas las que tomaba, pero sí que su marido también ingería el ansiolítico "cuando estaba triste". "Me di cuenta de que me lo cogía de mis pastillas porque un día se ve que no lo encontró y vino a pedírmelo", ha apostillado.

SOSPECHAS

   El primer testimonio de la vista fue el de la víctima y exmarido de la acusada a raíz de los hechos de 2013, y explicó que tanto el puré de espárragos del día 7 de enero, como la leche posterior, como el agua que tomaba en el hospital después "sabía muy amargo", y se refirió a los episodios de la intoxicación como momentos en los que no se tenía en pie, "estaba como drogado" o de los que no recordaba lo ocurrido.

   Respondió a preguntas de fiscal y defensa -la acusación particular no formuló ninguna en toda la mañana- sobre sus sospechas, y dijo que tras estar en coma en el hospital, él mismo iba a buscar el agua al pasillo, hasta que le dieron el alta pues sospechaba de su mujer. "Desde que volví a casa, yo sólo ingería las comidas que primero comía ella", ha abundado.

   El día 10 de marzo aseguró despertarse de madrugada "con un pinchazo agudo dentro del oído, como si estallase una vena" y recordó la llegada de un vecino y que luego perdió el sentido, como le ocurre "cada vez" que ve sangre, y en ese caso, su oído sangraba. Además, negó automedicarse y tomar tranxilium.

   A preguntas de la defensa, confirmó que su mujer le quitaba dinero de las cuentas y que "igual" quería matarle "para quedarse con el coche y con todo". Ahora están divorciados y tienen la custodia compartida de sus dos hijas.

OJOS EN BLANCO

   También declaró el vecino que el 10 de marzo ayudó a María José. "Me llamó por teléfono y dijo que Manuel volvía a estar muy mal", relató. Según el amigo del matrimonio, el hombre puso "lo ojos en blanco y se tragaba la lengua, así que le dije que llamase a una ambulancia", relató.

   La acusada le dijo que su marido se había caído en el baño, y el vecino manifestó ver en el hombre "algo parecido" a lo que le ocurrió a un hijo suyo, que sufrió un ataque en un partido de fútbol.

   Para el segundo día del juicio han quedado los informes periciales y las conclusiones de las partes. El fiscal pide 22 años de prisión para la acusada por un delito de intento de asesinato y otro de maltrato familiar.