A CORUÑA, 9 May. (EUROPA PRESS) -
El procesado José Carlos Marcos Seco, el padre de Isabel Marcos Maceiras, la joven acusada de matar a una conocida suya, Vanessa Lorente, y de apropiarse de su bebé, reconoció hoy que su hija le presentó en un primer momento al niño de la fallecida como hijo suyo.
En su declaración hoy, en la segunda sesión del juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de A Coruña, José Carlos Marcos --para el que el fiscal pide 7 años y 6 meses de prisión por un delito de detención ilegal del menor-- manifestó que, al insistirle, la procesada le explicó que era de una "amiga", pero precisó que nunca supo su nombre.
Según el fiscal, la procesada, de 28 años, mató a la madre del niño, Vanessa Lorente Jiménez, el 13 de agosto de 2002 después de haber estado consumiendo algo en una cafetería de Fene y de compras en un hipermercado. En la casa de sus padres en Monfero, enterró el cadáver, mientras que el niño permaneció con ella hasta su detención el 20 de septiembre.
Junto a ella, para el que el fiscal pide 20 años de prisión por un delito de homicidio y otro de detención ilegal, están imputados sus padres, José Carlos Marcos Seco y María Maceiras Corral, y su marido, Angel González Cernadas, por un delito de detención ilegal.
Hoy el padre explicó que su hija, antes de aparecer en casa con el niño, les dijo que era de ella, pero añadió que luego les explicó que era de una "amiga maltratada". Sobre porqué no devolvieron al bebé, afirmó que Isabel era "mayor de edad" y que él nunca supo de la desaparición de Vanessa, a la que aseguró no conocer.
VESPINO
También explicó que en su casa hubo una vespino, pero "de aquella no", respondió en relación con la época en la que sucedió la muerte de Vanessa y a preguntas de su abogado ya que su hija manifestó, en su declaración de ayer, que el hoyo donde apareció enterrada Vanessa se había hecho para depositar una vespino.
Sobre esta vespino, el marido de Isabel Maceiras explicó que el vehículo estaba en casa de sus padres desde hacía unos cinco años y añadió que "sigue allí". Sobre el bebé, manifestó que Isabel -de la que se había separado al año de casarse y con la que unos meses antes de su detención había reanudado la relación a petición de ella- le dijo que era de una amiga.
Negó que él lo hubiese hecho pasar como hijo suyo, aunque reconoció que a su madre le mintió para que no se opusiese a su relación con Isabel. También dijo que esta le contestaba si es que le "molestaba" el niño cuando él le preguntaba cuándo iba a volver la madre y aseguró que nunca vio a su mujer consumir droga.
También hoy prestaron declaración varios de los guardias civiles que intervinieron en la investigación y detención de Isabel Marcos Maceiras. Explicaron que fue la principal acusada la que les dijo, tras su detención, que Vanessa estaba muerta y enterrada en una finca de sus padres.
INCONGRUENCIAS
Aseguraron que, antes, a la salida de un tanatorio hasta el que le hicieron un seguimiento, les había dicho que el niño era su sobrino y que les contestó con "incongruencias" sobre el paradero de Vanessa.
"No era capaz de justificar el motivo por el que el niño estaba con ella y llegó a decirnos que Vanessa se había ido a Madrid con un chico", indicó uno de los agentes. Este guardia civil expresó sus dudas sobre la posibilidad de que alguien ajeno a la finca donde estaba el cuerpo de la víctima pudiese entrar sin que se enteraran los dueños o los vecinos "porque los perros ladraban mucho", añadió.
El juicio proseguirá mañana con la declaración de nuevos testigos. Está previsto que concluya el jueves, día 11, con la lectura de las conclusiones del ministerio fiscal y los cinco abogados, dos de la acusación particular y cuatro de la defensa.
Estos últimos piden la libre absolución para sus clientes, mientras que la acusación eleva las peticiones de condena del fiscal a 28 años en el caso de Isabel Maceiras, a 11 años en el caso de su madre y a 8 años, respectivamente, en el de su padre y marido.