Pleno.- Touriño valora el "salto sustantivo" del Plan Miner II y confía en "lograr los objetivos" fijados para Galicia

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, reivindicó hoy el "salto sustantivo" que el Plan Miner II 2006-2012 representa para las aspiraciones de las explotaciones y para las condiciones laborales en la comunidad y se mostró convencido de que el cierre de las negociaciones permitirán "lograr los objetivos" que se ha marcado Galicia.

En respuesta al portavoz del BNG, Carlos Aymerich, en la sesión de control al Gobierno del Parlamento, Touriño recordó que Galicia es, por detrás de Asturias y Castilla y León, la tercera autonomía que más fondos tiene garantizados a día de hoy y, por ello, destacó los avances "cualitativos y cuantitativos" recabados hasta ahora en el marco del acuerdo suscrito el 28 de marzo de 2006 entre el Ministerio de Industria, la patronal Carbounión y UGT y CC OO.

En su opinión, "en general, la marcha del trabajo es la correcta" y apunta a que el cierre de las negociaciones "rematarán de forma adecuada para Galicia". Así, subrayó que en el ámbito de las recolocaciones "se está cumpliendo", si bien precisó que está pendiente la apertura de una mesa para analizar nuevos proyectos empresariales, de los que se presentaron 33 el pasado año que suman una inversión de 130 millones de euros y supondrían la creación de más de 400 puestos de trabajo.

Además, recordó que las recolocaciones y el plan social "se aplicará por vías no traumáticas", como expedientes de regulación de empleo pactados o prejubilaciones voluntarias a partir de 52 años, así como la incorporación de los empleados de las firmas auxiliares a la principal "dentro de los acuerdos fijados" en casos como Endesa en As Pontes.

En este sentido, garantizó que en los casos que no puedan ser absorbidos, como ha ocurrido en Meirama (Cerceda) con Unión Fenosa, la Xunta abrirá una mesa de negociación para abordar los efectos, al tiempo que aludió a la ampliación de las ayudas para la reactivación de las comarcas mineras que, al incluir el lignito pardo, podrá beneficiar a otros 14 ayuntamientos gallegos.

URGENCIA

Al respecto, el nacionalista Carlos Aymerich coincidió en la mejora que supusieron los cambios del Plan Miner II respecto a los términos contenidos en el documento anterior, el de 1998-2005, que llevaron a Galicia a dejar de percibir 140 millones de euros por las diferencias entre el 8,49 por ciento de pérdida de empleo que aportó y el poco más del 2 por ciento de fondos que percibió.

No obstante, denunció que en el proyecto actual, fondos públicos financien la reconversión de empresas privadas y reclamó que, en consecuencia, el proceso sea "modélico" y garantice que "ningún trabajador quede en la calle".

Así, pese a mostrarse "consciente de la dificultad de los objetivos", advirtió de los "diferentes ritmos" que precisa Galicia en la negociación estatal, puesto que la actividad extractiva en el caso de As Pontes y Meirama cesará el próximo 31 de diciembre. "Los intereses de la mesa estatal no son los que urgen a los trabajadores de Galicia", subrayó.

En consecuencia, pidió "una solución rápida" para los empleados del carbón en Galicia y concretó que la reunión de la mesa estatal que tendrá lugar el 18 de julio supone una "oportunidad" para ofrecer una alternativa a los trabajadores de las empresas auxiliares en las ayudas del Plan Miner II. "Existe una responsabilidad de país, una deuda", subrayó.

PLAN DE REEQUILIBRIO

Por otra parte, el presidente de la Xunta dio cuenta en respuesta a su grupo parlamentario de los términos del Plan de Reequilibrio Territorial presentado el pasado lunes para evitar el "aislamiento y la desertización" de parte de Galicia. "No podemos permitirnos que el 88 por ciento del territorio concentre el 37 por ciento de la población", censuró.

Así, apeló a "aprovechar la buena marcha de la economía" para lograr "por primera vez" la convergencia no sólo con el resto del Estado y la Unión Europea, sino la "interna", para "abandonar las dos velocidades". "Es posible el objetivo ambicioso de una Galicia equilibrada", proclamó.

Para ello, reivindicó la inversión "sin precedentes" para actuar sobre más de un millón de gallegos repartidos por 254 ayuntamientos que se beneficiarán de 2.600 euros per cápita. "No hay razón para creer que inexorablemente el desarrollo tiene que dar una Galicia escindida en dos", subrayó, tras lo que garantizó una "concepción de país en la que las zonas más dinámicas no abandonen a su suerte a las menos desarrolladas".