SANTIAGO DE COMPOSTELA 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Servizo Galego de Saúde (Sergas) lamentó hoy la "violencia innecesaria" registrada en los tres días de huelga de los conductores de ambulancias y descartó asumir directamente la contratación de ambulancias porque "no es más que el contratista" de este servicio.
"No vamos a asumir directamente la contratación de ambulancias porque no vamos a convertirnos en empresarios del sector", explicó hoy, en declaraciones a Europa Press, el secretario xeral del Sergas, Antolín Rodríguez.
En este sentido, insistió en que el Sergas "no es más que el contratista" del servicio y subrayó que las personas en huelga "no son trabajadores" de la Administración sanitaria, ya que ésta contrata a empresas del sector para realizar este trabajo.
Al respecto, Rodríguez indicó que aunque se trata de un servicio que afecta a los ciudadanos, los responsables de la Consellería de Sanidade "no son los interlocutores inmediatos" en este conflicto sino que los empresarios y trabajadores deben resolver este conflicto laboral. "Tenemos una serie de contratos y un modelo empresarial, que es el que existía", precisó.
GARANTÍAS
No obstante, el secretario xeral del Sergas puntualizó que su departamento ha pedido a las empresas que tiene contratadas para el servicio de ambulancias "garantías de que cumplen el convenio". "No podemos hacer más", aseveró.
Rodríguez comentó que permanecen en contacto con el Consello Galego de Relacións Laborais pero reiteró que no participarán en la negociación para resolver el conflicto. Además, rechazó la acusaciones de los sindicatos y aseguró que la Xunta no promueve un sector minifundista y que el Sergas "no tiene la intención de intervenir en el modelo empresarial".
Con respecto al desarrollo de la huelga, Rodríguez insistió en que el Sergas ha tratado de conjugar el derecho de huelga de los trabajadores con la salud de los usuarios. Además, lamentó la "violencia innecesaria" registrada como quema de ambulancias, pinchazos de ruedas y amenazas a conductores que fueron transmitidas por estos a la Administración. Sin embargo, comentó que no hubo "grandes incidentes", ni "problemas serios" en el servicio.