LUGO 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los distintos jefes de los servicios administrativos del Ayuntamiento de Lugo, arquitectura y urbanismo, avalan la decisión del Gobierno local de permitir la construcción en la zona denominada como Costas do Parque.
Estas obras, ya iniciadas, han sido cuestionadas por una asociación de vecinos que llegó a llevar este asunto hasta los tribunales, que le dieron finalmente la razón al Ejecutivo municipal.
Los portavoces de los tres grupos municipales se reunieron hoy con estos técnicos que afianzaban las tesis que ha defendido desde el primer momento el Ayuntamiento de Lugo de la legitimidad de esta construcción, al amparo del Plan General de Ordenación Municipal (PGOM) de 1991 que fue aprobado por un Gobierno del PP.
En rueda de prensa, el concejal de Urbanismo, Francisco Fernández Liñares, indicó que lo fundamental es "la transparencia y legalidad" con que se acometió esta actuación por parte del ayuntamiento, incluso con un informe sobre el proyecto del constructor del servicio de arquitectura que reconocía "deficiencias técnicas", de ahí que se instara una corrección que está pendiente.
Liñares aprovechó para recriminar a la Consellería de Cultura que recomendase la paralización de estas obras, que prevén seis bloques de viviendas en la finca denominada de Garañón. Le recordó que "no tiene competencias" al tratarse de unos trabajos que no se realizan dentro del casco histórico.
Por su parte, el concejal popular Jaime Castiñeira, que también compareció ante la prensa, puntualizó que es preciso "minimizar" el impacto visual de estas viviendas, al tiempo que suscribió que el plan de 1991 "permitía otro diseño".
Son en total 87 viviendas las que se promueven y 80 locales sin uso, que no dudan en el grupo popular que finalmente se convertirán también en pisos.