FERROL, 27 Abr. (EUROPA PRESS) -
El patrón de pesca Manuel Martínez Álvarez, tío del marinero vecino de Ferrol que se arrojó al mar tras provocar supuestamente el lunes un incendio en la zona de máquinas del pesquero de Burela (Lugo) 'Zamorano I' que faenaba al oeste de las Islas Azores, cuestionó hoy que funcionara "correctamente" el sistema de búsqueda del desparecido, José Andrés Rodríguez Cornide.
En este sentido, Manuel Martínez aseguró que cuando su familiar se precipitó al agua "no saltó la alarma de salvamento que advierte de hombre al agua a todos los barcos que se encuentran navegando en ese momento", y añadió que "tampoco se tiraron radiobalizas, ni botes salvavidas".
Asimismo, el tío de José Andrés Rodríguez Cornide insistió en que el patrón del 'Zamorano I' lo primero que tenía que hacer "es activar el aviso de hombre al agua y tirar una balsa, pero no se hizo nada".
Respecto a los trabajos de rastreo, Manuel Martínez reconoció que "si el cuerpo desapareció a 170 millas, la búsqueda se ha convertido en un problema muy grave", porque un helicóptero "puede buscar durante una hora seguida como máximo", explicó.
"EN LA MAR DESDE NIÑO"
Este familiar recordó que José Andrés Rodríguez Cornide "lleva trabajando en la mar desde niño, desde hace más de 20 años", e indicó que lo tuvo a su cargo en cuatro barcos en el Gran Sol, "en condiciones muy duras y nunca tuvo un mal detalle con ningún compañero".
Manuel Martínez Álvarez realizó estas declaraciones acompañado del responsable de la CIG en la comarca de Ferrol, Xesús Anxo López Pintos, sindicato al que el marinero desaparecido está afiliado desde hace cinco años.
APOYO DE LA CIG
En este sentido, López Pintos anunció que la CIG "pone sus medios jurídicos al servicio de la familia, con el fin de que se sepa toda la verdad de lo que realmente sucedió", porque "parece que ya se ha condenado a una persona con acusaciones directas".
Además, el secretario del sindicato nacionalista señaló que ha tenido trato personal con José Andrés Rodríguez Cornide, de quien dijo que "tenía la cabeza muy bien amueblada, luchaba porque mejoraran las condiciones en la mar y tenía mucho cariño a su profesión".