VIGO 31 May. (EUROPA PRESS) -
Un espacio de más de 250 hectáreas, similar a la extensión de 360 campos de fútbol, es lo que se ha recuperado del suelo gallego en los últimos seis años. XILO Galicia, empresa del Grupo Toysal, en colaboración multidisciplinar con la Universidad de Santiago de Compostela, ha desarrollado este proyecto de rehabilitación de suelos como una solución ante problemas que causan desastres como la erosión o los incendios.
El suelo artificial está compuesto por una parte mineral de pizarra y una adición de biomasa, así como la utilización de lodos de residuos de depuración del sector alimentario. Las características propias de los lodos dan al suelo una capacidad de fertilidad inherente muy elevada, posibilitando la formación de un sistema capaz de almacenar nutrientes y liberarlos de forma progresiva, permitiendo recuperar zonas degradadas que se consideraban inutilizables como canteras, minas, suelo quemado o erosionado, entre otros.
Mediante la aplicación de este sustrato, la falta de capacidad orgánica del suelo se ve solventada, ya que la recuperación de las aptitudes productivas de la zona se produce de forma inmediata con su aplicación.
Santiago Meizoso, director general de XILO Galicia, explica que el principal beneficio que han detectado en estos años es la oportunidad de habilitar áreas que se consideraban inutilizables. "A largo plazo, la recuperación medioambiental será el principal beneficio. La recuperación de espacios con los que no se contaba o que, después de su uso, estaban destinados al abandono, es una gran oportunidad para mantener un equilibrio entre el crecimiento medioambiental y económico de Galicia", señala.
A pesar de los múltiples emplazamientos en los que se pudiera utilizar este suelo, el principal lugar al que se destina el suelo artificial en Galicia han sido los vertederos. Concretamente, esto se ve reflejado en los depósitos de Residuos Sólidos Urbanos ubicados en A Capela, Val do Dubra y Brión (A Coruña), en los que se han utilizado más 1.300 toneladas de este tipo de suelo.
Otro de los sitios en los que la recuperación del suelo se considera elemento estratégico en Galicia es en los espacios inutilizados por antiguas minas o canteras. En la localidad coruñesa de As Pontes, por ejemplo, la aplicación del suelo producido por XILO Galicia se ha dirigido a la restauración de la superficie ocupada por una escombrera y una mina, en una extensión aproximada de 100 hectáreas.
Los incendios, que en los países mediterráneos son los responsable del 11% de la superficie dañada total de los bosques de Europa, se mantienen como una amenaza para los bosques gallegos en estos próximos meses. La aplicación del suelo artificial para ayudar en la recuperación del suelo quemado se convierte en una solución para las graves consecuencias derivadas de los incendios.