Trabajadores de Treves se concentran ante Citroen y piden que presione para evitar el cierre de una de las plantas

Denuncian el traslado de producción a Marruecos y proponen reubicar a los afectados en O Campiño

Europa Press Galicia
Actualizado: martes, 1 septiembre 2009 14:58

VIGO, 1 Sep. (EUROPA PRESS) -

Unos 200 trabajadores de la auxiliar de la automoción Treves, que tiene dos centros de trabajo en Pontevedra y fabrica componentes textiles, se concentran ante la factoría viguesa de PSA Peugeot Citroën para pedir a la multinacional, como "cliente final" de sus productos, que "presione" ante Treves para evitar el cierre de una de las plantas --la de la Avenida de Vigo--.

Los operarios, acompañados de delegados sindicales, se reunieron a las 10.30 horas en la Plaza de América de la ciudad olívica e iniciaron desde allí una manifestación que recorrió la Avenida Fragoso y Balaídos, encabezada por pancartas en las que mostraban su rechazo a la deslocalización de Treves y a los expedientes de regulación de empleo (ERE).

La marcha, en la que participaron trabajadores de la planta amenazada de cierre --la de la Avenida de Vigo, con 133 puestos de trabajo-- y la de O Campiño, concluyó frente a la factoría de PSA Peugeot Citroën, donde los trabajadores se concentraron. Además, una representación de los trabajadores se reúne desde las 12.30 horas con representantes del Cluster de Empresas de Automoción de Galicia (CEAGA) y de la planta automovilística viguesa.

La presidenta del comité de empresa del centro de la Avenida de Vigo, Flora Pintos, explicó que el motivo de trasladar el primer día de huelga en Treves a la ciudad olívica es "tratar de convencer a Citroën", como "cliente final", de que "haga un esfuerzo para presionar a la empresa, que es una de sus auxiliares" y evitar así el cierre de la planta y el traslado de producción de Marruecos.

SOLIDARIDAD

Asimismo, lamentó que los trabajadores aún no han obtenido respuesta a su planteamiento alternativo de crear una nueva sección en la fábrica de O Campiño para que se trasladen allí los operarios del otro centro y se evite la pérdida de puestos de trabajo.

El presidente del comité del centro de O Campiño, David Couñago, recalcó que los trabajadores de esta factoría, que cuenta con casi 200 operarios, participan en la movilización de hoy por "solidaridad" y porque "tienen la mosca detrás de la oreja". Así recordó que Treves ya les planteó un ERE de extinción que implicaba 40 despidos y que, finalmente, se quedó en una regulación rotativa que afecta a 15 trabajadores por semana.

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