SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Santiago considera que la implantación de Ryanair en el Aeropuerto de Lavacolla supone "una revolución" y destaca la decisión de la compañía de operar desde el próximo 27 de febrero una nueva ruta con Nottingham, pero apuesta por estudiar el acuerdo firmado en 2005 para tratar de "diversificar" los destinos.
Así lo indicó hoy el alcalde compostelano, Xosé Sánchez Bugallo, coincidiendo con la fecha en la que la compañía anunció la implantación de una nueva ruta que, según el responsable municipal, "no estaba prevista en el contrato y se entiende que es a mayores".
La presencia de Ryanair en Lavacolla obedece al esfuerzo conjunto de Turismo de Santiago, la Xunta de Galicia, la Cámara de Comercio y la Asociación de Empresarios de Hostelería para impulsar la llegada de pasajeros extranjeros a la capital gallega y colocar a la ciudad en una posición privilegiada entre los destinos turísticos europeos durante todo el año.
Esta compañía de bajo coste, que empezó a operar vuelos en el aeropuerto compostelano desde abril de 2005 y que actualmente une la capital de Galicia con Londres, Roma, Frankfurt y Liverpool --desde el pasado 3 de octubre--, ya ha transportado más de 250.000 pasajeros en Lavacolla.
El regidor compostelano apuntó que hoy o mañana el concejal de Turismo de Santiago, Francisco Candela, mantendrá unos primeros contactos con el presidente de Ryanair, Michael O'Leary, para tratar sobre la evolución de la implantación de la compañía, aunque será a mediados de octubre cuando se pueda hacer una reunión de seguimiento del acuerdo firmado entre la empresa y el ayuntamiento.
"ILUSIÓN" POR OTROS DESTINOS EUROPEOS
Sánchez Bugallo declaró que el ayuntamiento "reconoce el esfuerzo de Ryanair en Santiago", ya que su implantación en el aeropuerto supone "una auténtica revolución". No obstante, explicó que "se están haciendo cosas que se alejan de lo previsto" porque, aunque en el acuerdo no estaban cerrados destinos concretos, "no se preveía reforzar tanto con el Reino Unido".
Tras resaltar que la ruta con Nottingham conectará a Santiago con el norte de Inglaterra, el alcalde compostelano admitió que "nos hace más ilusión más destinos con el norte de Europa". Por ello, enmarcó la necesidad de analizar el estado del acuerdo con Ryanair y de hacerlo pensando en función de un escenario en el que hay nuevas compañías como Vueling --con vuelos a París-- o Air Berlín --que conecta vía Palma de Mallorca con varios destinos europeos--.
En cualquier caso, Sánchez Bugallo declaró que "hoy Santiago tiene, dentro de los aeropuertos gallegos, la oferta más diversificada". No obstante, admitió que la decisión de Vueling de operar desde Lavacolla un vuelo con destino a París "alteró la primera idea" de que la compañía de bajo coste de Iberia, Clickair, ofreciese ese destino. No obstante, manifestó que "espera que venga también en su momento a Santiago".
Según Sánchez Bugallo, el ayuntamiento también quiere "diversificar" en Lavacolla la oferta de vuelos a destinos nacionales. Apuntó que las propias compañías se están posicionando en el mercado en función de la previsión de que el tren de alta velocidad llegue en 2010 y, un año después, se pueda reducir hasta en un 50% el uso de la conexión aérea con Madrid.
"MOTOR TURÍSTICO"
Por otra parte, el alcalde volvió hoy a referirse al proyecto de la Cidade da Cultura, en construcción en el Monte Gaiás, del que resaltó como "acertada" su ubicación en el municipio de Santiago y dijo debe ser capaz de actuar "como motor turístico" y convertirse en "referente de la cultura gallega y universal".
Reiteró la idea de que, con independencia de que se cambie o no el nombre al complejo arquitectónico "para que nos diga algo a todos", es "fundamental que se acierte" en los usos y contenidos que se darán a los edificios concebidos por el arquitecto estadounidense Peter Einsenman, porque "o es un gran éxito o un estrepitoso fracaso".
Según el alcalde, "todos los estudios y expertos apuntan a que esta obra es perfectamente rentable desde el punto de vista cultural y económico". Por ello, ante la visión de la Cidade da Cultura como "una obra faraónica" en la que se cuestiona la inversión --que asciende a 388 millones-- y su rentabilidad, Sánchez Bugallo la puso en relación con las Pirámides de Egipto y las repercusiones turística que tienen para ese país, que deseó puedan llegar a ser similares en el caso gallego sin esperar 1.000 años. Declaró que espera, y que cree que puede ser así, que "dentro de diez años" la Cidade da Cultura esté funcionando y atrayendo a gente, porque de lo contrario "sería un fracaso de país". El alcalde insistió en que este complejo, promovido y asumido por la Xunta, es "un proyecto de y para Galicia", al tiempo que admitió que "le parece bien" que se pueda implicar al sector privado en su financiación.