Vecinos de Bao-Poio (Pontevedra) piden al juez la ejecución "forzosa" de una sentencia que obliga a demoler 11 chabolas

PONTEVEDRA 24 May. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Vecinos de O Bao demandó hoy en el Juzgado de lo Contencioso Administrativo Número 3 de Pontevedra la ejecución forzosa de una sentencia que obliga al ayuntamiento pontevedrés de Poio a demoler 11 chabolas del poblado gitano.

El abogado de la Asociación Vecinal, Fernando Fidalgo, señaló que finalizó el plazo de dos meses que el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) dio al ayuntamiento para hacer efectiva la demolición, y sostuvo también que la Administración municipal "no está en condiciones de alegar imposibilidad material para ejecutar el derribo".

"El Ayuntamiento de Poio tiene fondos de sobra para llevar a cabo el derribo", aseguró Fidalgo tras recordar que recientemente el Colegio de Arquitectos de Pontevedra señaló que era "uno de los ayuntamientos con mayor poder adquisitivo".

La presidenta de la Asociación Vecinal O Bao, Carmen Esperón, no descartó, por su parte, la posibilidad de que aún así, el ayuntamiento trate por todos los medios de seguir demorando la ejecución de la sentencia, en cuyo caso anunció que emprenderá actuaciones penales contra el alcalde, el nacionalista Luciano Sobral, por un presunto delito de desobediencia.

Al colectivo vecinal le parece reprobable la "abierta negativa" del alcalde a acometer los derribos de unas chabolas que la propia administración municipal calificó de "ilegales e ilegalizables".

Según Fernando Fidalgo, el alcalde trata de justificarse mezclando el urbanismo con la problemática social que supone el realojo de las familias que viven en las chabolas, sobre las que pesa la orden de demolición. "El Ayuntamiento ha tenido tiempo suficiente para llevar a cabo las actuaciones sociales que estimase oportuno y si no lo hizo es su responsabilidad, no de la administración de Justicia ni del colectivo vecinal", indicó.

Recordó, además, que la propia sentencia, que el ayuntamiento está obligado a ejecutar, determinó que los problemas sociales tienen que ser resueltos adoptando medidas de esa naturaleza, y el derribo de las chabolas ilegales "es otra cosa".