La Xunta prevé elevar al 95% de la media europea el PIB per cápita en 2014 y "converger plenamente" en 2020

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

El Gobierno gallego se fijó hoy el reto de elevar el PIB per cápita de la comunidad del actual 90 al 95 por ciento de la media de la Unión Europea (UE) en el año 2014, con el objetivo de lograr la "plena convergencia" en el año 2020. Para lograrlo, priorizará la inversión en conocimiento, dinamización económica y sostenibilidad.

Lo avanzaron hoy el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y la conselleira de Facenda, Marta Fernández Currás, en la presentación conjunta del Plan Estratégico 2010-2014, con horizonte 2020, un documento que incluye un total de 46.664 millones de euros y más de 100 medidas para alcanzar "un nuevo modelo económico".

Ambos mandatarios incidieron en que este plan parte de un análisis previo de las oportunidades y debilidades de Galicia, inmersa ahora mismo, según Feijóo, en una "depresión económica". Fernández Currás coincidió en que el plan "no es ajeno" a las dificultades económicas "globales", pero se mostró optimista y pronosticó que Galicia "saldrá de la crisis antes que los demás".

"De momento, todos los indicadores, empezando por la recaudación tributaria, nos señalan que la economía de la comunidad crece", explicó la conselleira y recordó que la Xunta pronostica "un tímido crecimiento" del 0,2 por ciento en 2010. Eso sí, admitió que los analistas económicos sitúan la creación de empleo en torno "a un nivel de crecimiento de entre el 1,5 y el 2 por ciento".

Con todo, Currás matizó que eso no significa "que no se pueda crear empleo neto antes". "Y nosotros confiamos en poder hacerlo antes que los demás", agregó, para señalar, al tiempo, que la Xunta prevé "crecimientos por encima del 1 por ciento" a partir de 2012 y reafirmarse en el objetivo de elevar el PIB per cápita en cinco puntos --hasta el 95 por ciento de la media europea-- en 2014.

"PRIORIZAR" RECURSOS

En este marco, el Consello de la Xunta aprobó esta mañana el que está llamado a ser su documento de planificación económica para los próximos cuatro años, partiendo de la concepción de Galicia "como ciudad única" y con el fin de hacer de la comunidad "un lugar para vivir, trabajar e invertir".

La clave para lograrlo está, según el presidente gallego, en saber "priorizar" y, para ello, el documento recoge cinco ejes de actuación principales. El referido a la cohesión social, bienestar y calidad de vida será el que disponga de más recursos en los próximos cuatro años, con 28.689 millones de euros, mientras que se reservarán 7.898 para dinamización económica, crecimiento y empleo.

Del mismo modo, para la economía del conocimiento están previstos 1.443 millones de euros hasta 2014, frente a los 6.611 millones para la sostenibilidad ambiental y equilibrio territorial, y, por último, la Xunta reservará 2.023 millones de euros para lograr una Administración "austera, eficiente y cercana".

Sin embargo, la "priorización" llevará a que los recursos dedicados a la economía del conocimiento se incrementen un 37 por ciento en los próximos cuatro años, la sostenibilidad medioambiental y el equilibrio territorial un 21 por ciento y la dinamización económica y el empleo, casi un 20 por ciento, mientras que la media de aumento en este período será del 10,1 por ciento.

Fernández Currás reconoció que este plan afecta a la "actuación total" de la Xunta con los presupuestos para los próximos ejercicios, pero insistió en la necesidad de priorizar. "Sabemos que tenemos que atender los servicios públicos y gastos estructurales --como el personal--, pero buscamos fórmulas y socios que permitan hacer crecer los que consideramos ejes prioritarios", alegó.

FRACASO ESCOLAR Y TIC

En su intervención, además del PIB per cápita, Feijóo puso plazo a otros objetivos como reducir la tasa del fracaso escolar --del 26 al 20 por ciento en 2012 y por debajo del 10 por ciento al final de la década-- o que el porcentaje de población de entre 30 y 34 años con titulación de enseñanza superior se incremente desde el 41 a más del 45 por ciento en 2014 y que supere el 50 por ciento en 2020.

Igualmente, aspira a que el empleo de las TIC en hogares y empresas suba del 42,3 por ciento actual hasta superar el 55 por ciento dentro de cuatro años y el 75 por ciento en 2020. Mientras, el Gobierno gallego prevé que la inversión público-privada en I+D+i pase del 1 por ciento del PiB a más del 1,5 por ciento en 2014 y más del 3 por ciento al acabar este decenio.

En sostenibilidad, el reto es que el consumo de electricidad procedente de fuentes renovables sea del 70 por ciento en 2014 y del 80 por ciento en 2020, frente al actual 61,3 por ciento. Por último, la Xunta confía en que la producción de energías renovables sobre el consumo total de Galicia pase de representar el 13,8 por ciento actual al 20 por ciento dentro de cuatro años y al 30 por ciento al finalizar la década.

TRASLADO AL PARLAMENTO Y SEGUIMIENTO

"Un año después de entrar en el Gobierno cumplimos el compromiso: aquí está toda la política económica de la Xunta hasta 2014 y con proyección hasta 2020", proclamó el jefe del Ejecutivo autonómico, tras detallar el contenido del plan, que apuesta por el liderazgo "corresponsable", con la participación de administraciones y empresas, y por sustituir "la lógica de los recursos por la lógica de los resultados".

Además, Feijóo y Currás subrayaron que los retos emergentes y la crisis económica, junto con las "limitaciones presupuestarias" de los próximos años, obligarán a "reformular" el papel económico de la Administración para desarrollar un modelo sostenible basado en la innovación como "garante de competitividad y progreso social".

Se trata, resumió la conselleira, de impulsar un modelo "abierto y de cohesión", con la mirada puesta "en la Europa del año 2020", que se vaya transmitiendo de forma "transversal". Por ello, la Xunta cumplirá con su compromiso y someterá este documento al Parlamento, así como a las mesas del Diálogo Social para que se pueda "enriquecer y los acuerdos alcanzados serán "incorporados al texto".

Además, dispondrá de un sistema de seguimiento estratégico y de evaluación continua. Así, todos los pasos que seguirá serán medidos a través de indicadores y evaluados "cada año", con la fijación de prioridades, "adaptación" a un escenario financiero adverso, "cumplimiento" de los pactos de estabilidad, austeridad y eficacia de la Administración con la elaboración de las cuentas por objetivos.