Pesca.- Las conserveras aumentaron su producción en un 4,7%, con un valor de casi 1.200 millones de euros

VIGO, 2 Feb. (EUROPA PRESS) -

La empresas conserveras españolas aumentaron su volumen de producción en un 4,7% durante el año 2006 y el valor de las conservas de pescados y mariscos también creció en un 7,4%, con un total de 325.600 toneladas (en las que se incluyen también las semiconservas) y un valor de casi 1.200 millones de euros.

Así lo expuso hoy el secretario general de la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescados y Mariscos, Juan Manuel Vieites, quien presentó el balance de actividad del sector, que se desarrolla en un 80% en Galicia, y que cuenta con 147 (67 en Galicia) empresas operativas y más de 15.500 trabajadores (12.000 gallegos).

Vieites señaló que el sector "está satisfecho con los resultados" del año pasado, en el que las cifras de exportación también registraron incrementos importantes. Según los datos facilitados, que reflejan el período enero-octubre de 2006, el volumen de productos exportados creció un 8 por ciento, y el valor de estos productos experimentó un incremento del 13,56 por ciento.

El atún sigue siendo la especie 'estrella' en el sector, con una producción de más de 190.000 toneladas y un valor de 470 millones de euros, seguido por la sardina, con 28.600 toneladas y un valor de 87,8 millones. De entre todas las conservas producidas por el sector, el atún, la sardina, mejillones y caballa han crecido en volumen de producción, mientras que otras, como el pulpo, calamares, berberecho, navajas o almejas, han reducido su presencia.

En cuanto a los retos del futuro, Juan Manuel Vieites explicó que la meta de Anfaco es que el sector incremente su productividad en un 3 por ciento anual y su valor en un 4% ó 4,5% anual en los próximos siete años. Para ello, Vieites apuntó varias medidas para modernizar el sector, como la apuesta por el I+D+i, la mejora en la eficiencia logística, la mejora en el márketing, los planes de formación de los trabajadores o el aumento del valor añadido de los productos.

COMPETENCIA DE ASIA

El secretario general de Anfaco recordó que la principal preocupación del sector es la posible liberalización de los mercados por parte de la OMC, que permitiría el concurso se países del sureste asiático, como Tailandia, Filipinas o Taiwan, que "distorsionaría" el actual panorama de los productores de conservas de atún.

En ese sentido, explicó que el sector español pretende crear un "frente común" en la UE, junto con los países del Pacto Andino o del eje África-Caribe-Pacífico, para reclamar a la OMC que mantenga el 'status quo' arancelarios y no rebaje esas tasas del 24% al 7% como se ha propuesto.

Vieites afirmó que las empresas españolas "no pueden competir en precio" con estas conserveras, sino que debe hacerlo con otras "armas" como la calidad de los productos, el valor añadido y la búsqueda de nichos de mercado concretos, con conservas "étnicas destinadas a inmigrantes" o productos "sanos".

Además, subrayó que las conservas de estos países no ofrecen las garantías de calidad necesarias, su materia prima procede en ocasiones de la pesca ilegal (con diferencias de entre 200 y 300 dólares por tonelada de producto), y los salarios de los trabajadores del sector son de 0,5 dólares la hora, frente a los 2 a 14 euros por hora que cobra un trabajador de media en Europa.

APUESTA POR GALICIA

Juan Manuel Vieites también se refirió a la situación del sector en Galicia, donde la producción creció en un 6,8% y el valor de dicha producción aumentó en un 7%, es decir, que se produjeron 267.000 toneladas, por valor de 945 millones de euros.

Según el secretario general de Anfaco, el sector "mantiene su apuesta por Galicia" y desmintió que vaya a fomentar la deslocalización, sino todo lo contrario, insistió, ya que "se trata de aumentar la dimensión y concentración empresarial, pero promoviendo la internacionalización para ser más fuertes".

Vieites reconoció que las conservas tienen una buena posición en los mercados y buena aceptación por parte de los consumidores aunque, recalcó, "el sector no puede dormirse en los laureles". En ese sentido, abogó por la defensa de una marca gallega, "que sea reconocida y apreciada por sus valores singulares", uno de los objetivos del Plan Estratégico que el sector está desarrollando con la Consellería de Pesca.