FERROL, 18 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los mariscadores de las tres cofradías que trabajan en la ría de Ferrol --Ferrol, Barallobre y Mugardos--, retomarán las tareas de extracción de marisco el próximo 15 de julio, según quedó establecido en el calendario fijado hoy con la Consellería do Mar, en la primera reunión conjunta celebrada desde la constitución del nuevo gobierno autonómico.
En el encuentro que tuvo lugar en Santiago entre los representantes de los tres pósitos y el director xeral de Pesca, Pablo Fernández, se fijó que la extracción de marisco, para las embarcaciones, se desarrollará desde el 15 de julio al 15 de agosto, y durante el mes de diciembre. Para el marisqueo a pie, quedó establecido el mismo calendario, más los días comprendidos entre el 22 y el 26 de junio.
Según explicó el portavoz de la Cofradía de Barallobre al término de la reunión, Manuel Bañobre, también se planteó la posibilidad de retirar también --para su depósito en aguas limpias--, marisco del banco de O Couto, en el que se concentra un importante número de piezas de almeja japónica, fina y berberecho.
En cuanto a la retirada del mejillón, que esquilma las reservas de almeja, Bañobre añadió que los mariscadores plantearon la necesidad de buscar medios "más efectivos" que los actuales, para evitar la reproducción del molusco.
En el encuentro celebrado hoy, los mariscadores reclamaron además mayor vigilancia para hacer frente al furtivismo, y el acondicionamiento del banco de As Pías, en el que todavía quedan restos del Discoverer Enterprise.
La reunión celebrada responde a los encuentros mensuales de seguimiento del Plan de Empleo puesto en marcha por el anterior gobierno autonómico para dar respuesta a la situación de contaminación de la ría de Ferrol. Su catalogación como Zona C, debido a vertidos residuales, obliga a que el marisco sea capturado y depositado en aguas limpias de la ría durante dos meses para su depuración natural.
Los mariscadores perciben 82 euros diarios por estas tareas de "reparqueo", que complementan con trabajos de limpieza de la ría, de retirada del mejillón y de vigilancia, y que se prolongan durante ocho meses al año. El resto, se dedican a la extracción y venta del marisco ya depurado en aguas limpias.
