SANTIAGO DE COMPOSTELA 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un total de 980 kilos de diferentes especies de pescados fueron requisados en un operativo de control de comercialización realizado por agentes del servicio de Gardacostas de Galicia, dependiente de la Consellería de Medio Rural e do Mar, en colaboración con la Policía Autonómica.
La mercancía decomisada estaba en una furgoneta que partió del puerto de Camariñas y tenía como destino la lonja de Marín (Pontevedra). Los agentes pararon el vehículo en Vimianzo en un control de comercialización por carretera, y le requisó la mercancía debido a que esta cantidad de pescado no figuraba en el documento de transporte.
En concreto, la mercancía se corresponde con 325 kilos de rapante, 295 kilos de merluza, 195 kilos de jurelo, y 165 kilos de pota. Posteriormente, el pescado fue subastado en lonja y el dinero resultante fueron para las arcas públicas.
Por otro lado, efectivos de Gardacostas y la Policía Autonómica realizaron otro operativo de control de comercialización y de furtivismo por carretera y en playa en la localidad coruñesa de Muros, que se saldó con la identificación de dos furtivos a los que los agentes les requisaron dos raños.
En total, en el control de carretera realizado en Muros y en Vimianzo, los agentes pararon e inspeccionaron 75 vehículos e identificaron a 110 personas.