PALMA DE MALLORCA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
Dos acusados por una agresión sexual y un delito de lesiones a una mujer en el noreste de Mallorca en septiembre de 2015 han asegurado este lunes durante el juicio que los hechos fueron consentidos y que en ningún momento agredieron a la víctima ni la insultaron. Los acusados tenían 18 años en el momento del suceso.
Sin embargo, la Fiscalía considera que mientras la chica estaba manteniendo relaciones sexuales con uno de los procesados. J.A.C, el acusado J.A.V forzó a la chica a que le realizara una felación, negándose ella en todo momento. En este caso, el joven se puso agresivo y le empezó a insultar.
Aunque con el otro acusado, J.A.C, sí estaba manteniendo relaciones sexuales, en un momento dado éste se puso también agresivo con ella, golpeándola fuertemente en las nalgas y penetrándola hasta provocarle un sangrado vaginal.
Durante su declaración ante el tribunal del caso, J.A.C. ha explicado que en todo momento la chica sabía que iban a realizar un trío y que cuando le pidió que parara, este se alejó y se empezó a masturbar a su lado. "Salió andando tranquila, no llorando y ya abajo empezó a gritar que la habían violado", ha explicado.
El otro acusado ha explicado que los dos trabajaban en un discoteca de la zona --él como recogevasos y el J.A.C. como camarero-- y que conocieron a la chica que estaba en el local como cliente y convinieron ir a realizar un trío. Según ha explicado, se metieron en el coche de uno de ellos y cuando vieron una zona apartada ahí se bajaron. Él conocía una casa abandonada que estaba cerca y subieron al primer piso donde en una de las habitaciones había un colchón.
Tras esto, ha explicado que la chica empezó a practicarle una felación mientras su compañero tenía sexo vaginal con ella pero que este le pidió que lo hiciera con más cuidado porque "le estaba raspando con los dientes". Así pues, según su versión en el juicio, la mujer le dijo que no quería tener más relaciones con él y este se apartó y se fue a masturbar mientras su compañero continuaba teniendo relaciones.
Cabe destacar que esta versión se contradice con la recogida por la Policía en su atestado ya que de esta se deduce que el acusado intentó penetrarla vaginalmente también.
El acusado también ha explicado que la mujer les veía como "unos niñatos" ya que era un poco más mayor. "No me vais a durar nada, que sois unos niñatos", ha asegurado que les dijo.
Por su parte, la forense ha explicado que la víctima estaba "muy nerviosa y enfadada" cuando le practicó el examen. Además, ha detallado que encontraron lesiones en la zona glútea que son compatibles con "un golpe directo" como el dado con un objeto o con la mano abierta.
Además, la mujer presentaba un sangrado compatible con "una relación intensa", o el provocado por la gran proporción del miembro masculino "o por una relación sexual no consentida".
Asimismo, el recepcionista del hotel al que la víctima fue a pedir ayuda ha explicado que llegó desnuda "llorando" al hotel.
Uno amigo de los acusados, que trabajaba en la discoteca de enfrente, ha dicho que estos le explicaron el mismo día de los hechos que se iban a hacer un trío con la víctima y que ella, que ya estaba en el coche, podía haber escuchado esto perfectamente. "Aunque estaba borracha, era consciente de lo que hacía", ha asegurado.
El regente de la discoteca ha señalado, por su parte, que las cámaras de seguridad del local, reflejaban una "cierta complicidad" entre la chica y los chicos.
Un guardia civil que atendió el caso ha explicado que la víctima estaba cubierta por una manta o mantel de manera improvisada ya que --y aquí las versiones difieren-- había salido desnuda por completo o semidesnuda, solo con la parte de arriba, a la calle a pedir ayuda.
En la habitación de la casa, según ha explicado el guardia civil, encontró un colchón con una sábana por encima, velas encendidas, un pantalón corto y una prenda de ropa interior femenina --unas bragas--, que posteriormente la víctima reconoció como suyas.
Tras escuchar todos los testimonios, el presidente del tribunal de este caso, el juez Jaime Tártalo, ha dado el juicio como visto para sentencia.
