Los comerciantes constatan una ligera recuperación de las ventas en abril gracias a los descuentos y promociones

Actualizado: jueves, 7 mayo 2009 14:46

PALMA DE MALLORCA, 7 May. (EUROPA PRESS) -

Los comerciantes de Baleares han constatado una ligera recuperación de las ventas el pasado mes de abril gracias a la disminución de los precios, vía promociones y descuentos, y a los efectos del calendario, al coincidir la Semana Santa con el mes de abril, rompiendo con la tendencia decreciente en los resultados de ventas de los últimos meses.

Así lo pone de manifiesto el Barómetro mensual que realiza Pimeco, que refleja, sin embargo, que el 73 por ciento de los comerciantes cree que las ventas el mes pasado han sido peores que en el mismo mes del año pasado. De este modo, pese al ligero repunte al alza en abril, las ventas siguen siendo insuficientes debido la caída del consumo, lo que está ocasionando una situación de "notable debilidad" en los comercios minoristas, según subraya Pimeco.

La patronal manifiesta que la caída de las ventas ha provocado una disminución de la cuenta de explotación, "poniendo en peligro la viabilidad empresarial de los comercios" y, en consecuencia, el "empleo en el sector". Por tanto, pese a la leve remontada de las ventas en abril, sólo el 13 por ciento de los encuestados considera que las ventas fueron mejores que en marzo, frente al 37 por ciento que cree que fueron peores, lo que confirma que la tónica general sigue sin ser positiva.

Por zonas, mientras en Palma ciudad el 48 por ciento de los comerciantes considera que han sido peores, en la Part Forana esta cifra desciende hasta el 26 por ciento. No obstante, la valoración global que realizan los comerciantes del conjunto de Mallorca de la actividad comercial del mes de abril sigue siendo un suspenso, con un 4,5.

Pimeco concluye en su informe que pese a la ínfima pero alentadora recuperación el mes de abril respecto al mes anterior, cuando se observan los resultados en relación al año 2008 la percepción es "claramente negativa" tanto en Palma como en los restantes pueblos de Mallorca, donde más del 70 por ciento cree que las ventas han sido peores.