IBIZA, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un informe de la Comisión Insular de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Patrimonio Histórico Artístico (Ciotupha) dictamina que el Consell de Ibiza no tuvo responsabilidad patrimonial en el derribo de la mansión del músico y compositor rumano Michael Cretu, demolida el pasado verano en la cima de un monte de Santa Inés de Corona.
Los promotores de la obra, Baloo Music SA y Eden Roc S.A, solicitaron una indemnización de más de 20 millones al Ayuntamiento de Sant Antoni por haber concedido la licencia para la construcción de la vivienda que después fue derruida.
El Consistorio envió documentación al Consell con la intención de que esta administración compartiera la responsabilidad en la construcción de la mansión.
Sin embargo, ha eximido al Consell de cualquier responsabilidad en el otorgamiento de la licencia, aunque ha precisado que la autorización concedida por la Corporación de Portmany no permitía edificar la totalidad de la obra que levantó el productor del grupo musical Enigma. En este sentido, la Comisión de Urbanismo ha subrayado que gran parte de la casa se levantó de manera ilegal, sin estar amparada en la licencia municipal.
"El resultado final de todo lo que se construyó tiene muy poco que ver con lo que se autorizó", ha reconocido el conseller insular de Política Territorial, Miquel Ramon, quien ha detallado que los promotores del proyecto falsearon los datos y ha revelado que, desde las obras de cimentación de la casa, ya se pretendía construir más de lo que permitía construir el Ayuntamiento en la licencia.
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