El Consell aprueba construir un monumento en Mallorca para honrar a las víctimas del franquismo y de la Guerra Civil

El pleno del Consell de Mallorca acordó hoy, por unanimidad, construir en algún punto de la isla un monumento conmemorativo dedicado a las víctimas de la represión franquista y, en general, de la Guerra Civil, a pesar de que el pasado mes de enero ya se aprobó la instalación de un memorial de estas características en Palma, que no ha salido adelante por falta de acuerdo entre la Institución Insular y el Ayuntamiento de la capital.

La moción presentada por el Grupo Socialista contemplaba que un grupo de representantes de todos los partidos, con presencia también de familiares de las víctimas, eligieran el lugar del monumento y acordaran qué elementos de referencia debían constituir el memorial. Aunque el texto original hablaba sólo de "víctimas del franquismo", todos los consellers aceptaron la propuesta del PP para que el homenaje se extendiera a todas las "víctimas de la Guerra Civil".

No obstante, el portavoz del PSM en la Institución Insular, Antoni Alorda, aclaró, momentos después de la votación que, su apoyo a la enmienda de los 'populares' de había debido a un error, ya que, en su opinión, no pueden incluirse en un mismo conjunto a las víctimas de la guerra y a los muertos en un periodo de posguerra por motivos "inhumanos".

El conseller socialista Antoni Crespí aceptó la incorporación de estas palabras a la moción pero remarcó que, en Mallorca, los muertos en la época franquista no fueron en su mayoría víctimas de guerra, sino que fueron "asesinados por vendettas personales". "No se puede poner en una balanza a unos y otros", añadió.

Por su parte, el portavoz del PP, Fernando Rubio, lamentó la actitud de los nacionalistas al considerar que no valora el "afán de consenso y de unidad" que pretende la propuesta de un monumento conjunto. "Será un reconocimiento a todas aquellas personas que han sufrido la represión, venga de donde venga. Es un gesto necesario para mantener la unidad", dijo.

Desde el grupo de EU/EV, Margalida Rosselló, consideró que la construcción de este memorial supone que "todos los partidos han asumido la realidad de la democracia, dejando atrás la represión política". Por parte de UM, Francesc Buils, apoyó la iniciativa socialista y recordó la importancia de que se explicite el hecho de que parte de las víctimas cayeron en defensa de la democracia y formando parte de instituciones representativas.