Bancada de la oposición, entre la que se encuentra el grupo socialista, en el Consell de Mallorca. - PSIB
PALMA 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Consell de Mallorca ha rechazado una moción del PSIB que proponía realizar una auditoría sobre la gestión "opaca e improvisada" del Instituto del Deporte Hípico de Mallorca (IEHM), organismo que gestiona los hipódromos de Son Pardo y de Manacor.
La iniciativa, han indicado los socialistas en un comunicado, pretendía poner luz sobre "las contrataciones verbales sin expedientes, el fraccionamiento de facturas y la ausencia de contratos que se pagan por orden del Consell Executiu a través del mecanismo que omite la fiscalización".
Todas estas cuestiones, han aseverado, han quedado acreditadas en diversos informes de la Intervención del Consell. No obstante, han lamentado, tanto el PP como Vox, que conforman el equipo de gobierno insular, han votado en contra de realizar una auditoría.
Para el conseller del grupo socialista Andreu Serra, lo que está pasando en el IEHM "es un ejemplo claro de mala administración, falta de transparencia y menosprecio por la legalidad".
A su parecer, el conseller insular de Medio Natural, Medio Rural y Deportes, Pedro Bestard, quien está al frente del Instituto, debería ser reprobado por la gestión del trote.
"No estamos hablando de simples errores administrativos, sino de decisiones que podrían tener consecuencias legales graves. Es inadmisible que Son Pardo funcione sin licencia, poniendo en riesgo la seguridad jurídica y la confianza ciudadana", ha sostenido Serra.
La moción de los socialistas también buscaba poner el foco sobre las obras anunciadas para mejorar las instalaciones de Son Pardo, que continúan inacabadas, y en el cierre persistente del bar del hipódromo de Manacor.
"Prometen mejoras, pero la realidad es una gestión deficiente, llena de promesas incumplidas y decisiones improvisadas", ha dicho el conseller.
Además de realizar la auditoría, la intención del PSIB era que se abriera de forma inmediata toda la documentación relativa a actividades, contrataciones, licencias y obras, así como la publicación de un resumen en el portal de transparencia.
También adoptar medidas para depurar responsabilidades políticas y administrativas y establecer protocolos que garanticen una gestión futura "basada en la legalidad, la transparencia y la buena administración".
"El Consell de Mallorca no puede mirar hacia otro lado. Si queremos instituciones fuertes y respetadas debemos ser implacables con la mala gestión y exigir responsabilidades", ha concluido Serra.