La Gerencia de Urbanismo aprueba modificar el Plan General de Palma para proteger el monumento de Sa Feixina

El regidor de Urbanismo, Óscar Fidalgo, en rueda de prensa
El regidor de Urbanismo, Óscar Fidalgo, en rueda de prensa - EUROPA PRESS
Actualizado: martes, 8 abril 2025 17:38

PALMA 8 Abr. (EUROPA PRESS) -

La Gerencia de Urbanismo ha aprobado modificar el Plan General de Palma para incluir el monumento de Sa Feixina en el Catálogo de Edificios y Elementos Protegidos de la Ciudad.

Así lo ha comunicado este martes el regidor de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma, Óscar Fidalgo, en la rueda de prensa posterior a la Gerencia de Urbanismo, en la que ha celebrado que el Consejo de Gerencia de Urbanismo haya dado el visto bueno a trasladar a la Junta de Gobierno la aprobación inicial de modificación del Plan del 98 en relación a la catalogación del monumento de Sa Feixina. Una modificación que, ha añadido el regidor, posibilitará que el monumento pase a ingresar en el Catálogo de Edificios y Elementos de Interés Histórico, Artístico y Arquitectónico de la Ciudad de Palma.

"Dado que no se prevé ningún otro uso para este monumento, se le asignará la máxima protección de carácter integral", ha destacado Fidalgo. No obstante, esta decisión se someterá a información pública durante 30 días, tras su publicación en el Boletín Oficial, y se solicitará información previa al Consell de Mallorca, ya que, en sesión plenaria del mes de octubre del año 2023, la institución insular acordó declarar bien catalogado el monumento de Sa Feixina.

El regidor ha creído importante hacer una memoria de cronología sobre el iter procesal del monumento de Sa Feixina. Así ha rememorado como en el año 2010, el Ayuntamiento de Palma, siendo alcaldesa Aina Calvo, del Partido Socialista, decide no derribar el monumento, declarando el obelisco como "un símbolo de la voluntad democrática de no olvidar los horrores de la guerra y de la dictadura".

En aquel momento, y por unanimidad de todos los grupos del pleno de Cort, "se retiraron todo tipo de simbología y de alusiones que pudieran comprometer cualquier circunstancia ideológica que tuviera que ver con el monumento de Sa Feixina", ha apuntado, poniendo el foco en que eso "se hizo por iniciativa del entonces sentido común del Partido Socialista, que hoy, parece ser, ha cambiado de opinión".

Posteriormente, en el año 2015, el Consell de Mallorca y el Ayuntamiento de Palma, gobernados por partidos contrarios a mantener este monumento de Sa Feixina deciden, en contra de lo acordado en el año 2010, derribar y demoler el monolito.

En el año 2016, ARCA pide al Consell que no derruya este monumento, y presenta junto con asociaciones vecinales y entidades un recurso contencioso administrativo contra la demolición. El Ayuntamiento entonces insiste en su demolición, ha continuado recordando el regidor de Urbanismo.

En el año 2019, el Ayuntamiento de Palma aprueba modificar el Plan y demoler el monumento pero se ve obligado a suspender esta modificación ante las alegaciones de ARCA y vecinos, a la espera igualmente sub iudice de una resolución judicial de un recurso presentado por ARCA y las entidades vecinales de Santa Catalina.

En 2020, el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3, en sentencia 94/2020 del 24 de febrero, da la razón a las entidades vecinales. Esta sentencia, que es recurrida, es ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares, en sentencia 312/2021 del 26 de junio. Y, finalmente, el Tribunal Supremo, el 6 de octubre del 2022 rechaza absolutamente todos los argumentos contrarios a la catalogación del monumento y ratifica lo dispuesto en primera instancia por el Tribunal Superior de Justicia de Baleares.

De este modo, el regidor de Urbanismo ha querido decir que "caerá en saco roto cualquier intento de confrontación, utilizando la teoría política e ideológica de lo que tiene que ver con esta decisión que hoy toma el Ayuntamiento de Palma", pues ésta "no tiene nada más que ver que con el cumplimiento estricto de una sentencia judicial".

Finalmente, Fidalgo ha recordado lo que todos los grupos acordaron en su momento que figurara en la base del monumento de sa Feixina, pues "es algo en lo que ningún demócrata puede estar en desacuerdo", y dice: "Es para la ciudad símbolo de la voluntad democrática de no olvidar nunca los horrores de las guerras ni las dictaduras".