PALMA, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Consell de Mallorca ha acordado con Emaya y el Govern la apertura de la celda de entierro controlado para animales de grandes dimensiones, con el objetivo de dar respuesta a "una problemática" que perjudicaba especialmente al sector ganadero de la isla.
Según ha informado el área de Sostenibilidad y Medio Ambiente del Consell en nota de prensa este martes, la celda se encuentra "en el vertedero de cola" y es la empresa Emaya quien se encarga de gestionarla.
Sin embargo, el Plan Director Sectorial de Residuos No Peligrosos de Mallorca, aprobado por el Pleno del Consell en mayo de 2019, especifica que es el servicio público insular de la institución quien tiene que tratar estos residuos obligatoriamente.
Por tanto, a partir de ahora la Conselleria podrá tramitar ante la Entidad Estatal de Seguros Agrarios (Enesa) y Agroseguro la activación de la línea de seguro agrario para la retirada de cadáveres y la licitación de un gestor autorizado --Subproductos de origen Animal No Destinados al Consumo Humano (Sandach)--, que se encargará de la recogida y traslado de animales a la celda.
Dicho seguro, que cubre la retirada, el traslado y las tasas de uso de la celda, estará financiado en un 55 por ciento entre el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y la Conselleria del mismo ámbito.
Las tasas son las correspondientes a los Desperdicios de Origen Animal (DOA) y suponen un total de 37,73 euros por tonelada. Desde el Consell han recordado que se bonificó esta tasa con el máximo permitido por la ley, además de hacer una aportación de 100.000 euros para reducir su precio lo máximo posible.
La consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación del Govern, Mae de la Concha, ha destacado que la apertura de esta celda "servirá de gran ayuda para facilitar el trabajo en el sector ganadero", dando respuesta a "una petición histórica para poder gestionar el entierro de animales con todas las garantías ambientales y sanitarias".
Por su parte, la vicepresidenta y consellera de Sostenibilidad y Medio Ambiente del Consell, Aurora Ribot, ha calificado de "muy necesario" el depósito, ya que soluciona la gestión de unos residuos que, por sus dimensiones, suponían "un verdadero problema para los ganaderos y el servicio insularizado".
