PALMA, 20 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Govern y el Ayuntamiento de Pollença han rendido homenaje este miércoles a las cuatro víctimas de la represión franquista naturales del municipio mallorquín que han sido localizadas en las fosas exhumadas por el Ejecutivo balear y que han podido ser identificadas y devueltas a sus familias hasta la fecha.
Según ha detallado la Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática en nota de prensa, se trata de Miquel Marquet Perelló y Antoni Castañer Cifre, recuperados de la fosa de Marratxí en septiembre de 2018, y Antoni Oliver Jordà, enterrado en una fosa común en el cementerio de Llucmajor y recuperado en enero de 2019. Sus restos ya fueron devueltos a sus familias en marzo del año pasado, cuando también se les entregó el certificado del Govern de víctimas del franquismo.
Asimismo, se ha rendido también homenaje a Josep Pont Cladera, recuperado de la fosa de Calviá en octubre de 2018 e identificado este pasado mes de febrero. Sus restos han sido entregados a sus familiares en un acto íntimo celebrado este miércoles, junto con una copia del informe científico que certifica la identificación de los restos recuperados. Su familia fue una de las que recibió el 29 de octubre de 2021 el certificado de víctimas del franquismo que entregó el Govern a 124 familias de personas asesinadas en las Islas.
La identificación biológica de los cuatro 'pollencins' la ha llevado a cabo el laboratorio BIOMICs de la Universidad del País Vasco (Vitoria-Gasteiz) y ha sido posible gracias a los análisis de ADN realizados a partir de las muestras de los familiares, así como a la elaboración de estudios antropológicos desarrollados por la Sociedad de Ciencias Aranzadi. Estos trabajos se enmarcan dentro de los Planes de Actuaciones en Fosas de la Guerra Civil y el Franquismo 2018-2019 y 2021-2022 del Govern.
En total, se han podido recuperar hasta la fecha los restos de 218 personas asesinadas en las Islas durante la Guerra Civil y el Franquismo, de las cuales ya se ha identificado a 36 y devuelto 34 a sus familias.
En el homenaje celebrado este miércoles en Pollença junto a los familiares de las víctimas han participado el secretario autonómico de Memoria Democrática y Sectores Productivos del Govern, Jesús Jurado; el alcalde de Pollença, Tomeu Cifre; la representante de la Comisión de Desaparecidos y Fosas de Baleares, Antonia Mercadal; y la representante de la Comisión de Memoria de Pollença, Marina Llobera, entre otros.
Durante el acto, Jurado ha agradecido "la constancia y la lucha" de las familias, "ignoradas por todos los gobiernos hasta hace muy poco", así como el trabajo de entidades memorialistas como Memoria de Mallorca o la Comisión de Memoria de Pollença, "que no han dejado de reivindicar y de proponer iniciativas para avanzar por el camino de la verdad, la justicia y la reparación".
También se ha dirigido a la comunidad de investigadores, cuyo trabajo y conocimiento, ha dicho, "es imprescindible para poder recuperar estas historias que un golpe de estado fallido, una terrible guerra civil y una dictadura cruel han intentado borrar".
Por su parte, el alcalde de Pollença ha destacado la importancia del acto "para dar visibilidad a las familias, que ya han podido enterrar a sus familiares como corresponde, pero también para darles todo el apoyo institucional en la tarea que están haciendo por obtener justicia y, sobre todo, por recuperar e identificar los restos de sus seres queridos".
JOSEP PONT CLADERA
Josep Pont Cladera fue acusado de participar en la resistencia 'pollencina' al golpe de estado y de haber sido quien llevó los carabineros hacia el puerto de Pollença ante la inminente entrada del ejército sublevado en el pueblo. Fue puesto en busca y captura.
Su familia lo escondió más de dos meses y su padre preparó su fuga de la isla, pero hacia finales de septiembre de 1936, los falangistas lo encontraron y lo encerraron en la Limonera, la prisión de Pollença.
El 30 de septiembre fue sacado de la cárcel junto a otros dos hombres. Al día siguiente, los tres aparecieron muertos alrededor del kilómetro 9 de la carretera de Andratx, con las manos atadas y con múltiples impactos de bala.
ANTONI CASTAÑER CIFRE
Antoni Castañer fue acusado de participar en los actos de resistencia al golpe de estado. Él mismo se presentó ante las autoridades al saber, al volver del trabajo, que habían ido a su casa a buscarle.
Después de estar unos días encerrado en la prisión de Pollença, fue trasladado a Palma, con otros dos prisioneros más. Su cuerpo apareció el 22 de agosto de 1936 junto a dos hombres en el km 7,8 de la carretera Palma-Inca.
MIQUEL MARQUET PERELLÓ
Miquel Marquet, de militancia posiblemente socialista, después del golpe de estado y de la entrada del ejército sublevado en Pollença fue acusado de haber participado en los actos de resistencia y de defensa del Ayuntamiento republicano, y fue puesto en busca y captura.
Estuvo escondido cerca de un mes, pero los falangistas que lo buscaban amenazaron con detener a su mujer, razón por la cual se entregó, han asegurado desde el Govern. Tras permanecer unos días detenido en Pollença, fue trasladado a Palma con dos hombres más --uno de ellos Antoni Castañer Cifre--. El 22 de agosto de 1936 lo encontraron muerto junto a estos dos hombres en el km 7,8 de la carretera Inca-Palma.
ANTONI OLIVER JORDÀ
De Antoni Oliver no se conocía militancia política, pero la información que tenía su familia en lo referente a las circunstancias de su muerte era que, mientras cumplía condena por delito común, se metió en problemas por haber ayudado a un preso político.
Revisando la causa 978/36 se deduce que fue forzado a declarar contra el empresario alcudienc Antoni Maria Ques y que reconoció a un compañero suyo, que tuvo que inventar después de dos semanas en aislamiento e incomunicado en Can Mir.
Al igual que sucedió con otros testigos de esta causa judicial, cuando la defensa quiso llamarles a comparecer para ratificar las acusaciones, habían desaparecido.
Oliver fue encontrado muerto el 19 de diciembre de 1936, en el km 19,8 de la carretera Palma-Portocolom, con las características típicas de los asesinatos cometidos por las milicias fascistas en aquella época.