PALMA, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El Govern balear ha calificado de "caos" la implantación del sistema de tarjetas de alimentos del Gobierno y ha reclamado que se aporte más información sobre el funcionamiento de la medida.
Así lo ha indicado el director general de Asuntos Sociales, Josep Falcó, quien ha lamentado que una semana después del plazo previsto no haya entrado en vigor el Programa de Asistencia Material Básica, conocido como tarjeta de alimentos, según ha señalado la Conselleria de Familias y Asuntos Sociales en una nota de prensa.
En esta línea, Falcó ha instado al ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, a aportar información sobre cómo funcionará.
"Desde el pasado mes de enero, cuando el ministro nos adelantó el nuevo sistema que debía sustituir el tradicional de distribución de alimentos, no hemos recibido más información, lo que genera incertidumbre y caos y nos pone, a las comunidades autónomas, en una situación precaria", ha subrayado el director general.
Según ha explicado la Conselleria, la tarjeta de alimentos debería haberse empezado a distribuir para que funcionaria hasta diciembre de 2024 bajo la gestión del Ministerio y de Cruz Roja, para trasladarla posteriormente a las comunidades autónomas, a partir de 2025.
Sin embargo, Falcó ha considerado que el Ministerio ha generado una situación de descoordinación, puesto que, además, "se niega a establecer los criterios en materias esenciales", como la derivación de familias, el acceso de personas vulnerables al programa, las medidas mínimas de acompañamiento, la compatibilidad con otras ayudas como el Ingreso Mínimo Vital (IMV) o la protección de datos de los beneficiarios.
Igualmente, la Conselleria ha recordado que estableció una convocatoria de ayudas extraordinaria de 1,6 millones de euros para la compra de alimentos, destinada a entidades de reparto y a comedores sociales.
La convocatoria tenía el objetivo de llegar a las personas que hasta ahora percibían una ayuda para la compra de alimentos pero que ya no recibirán porque, por ejemplo, no tienen menores a su cargo. Esta cuestión fue criticada por la consellera de Familias y Asuntos Sociales, Catalina Cirer, quien lamentó que el nuevo sistema de tarjetas de alimentos dejaba fuera a colectivos en situación de vulnerabilidad, como personas mayores o con discapacidades.
Con todo, el director general de Asuntos Sociales ha arremetido contra el Ministerio ya que, a su juicio, obliga a la comunidad autónoma a hacer "un esfuerzo extra" para "llegar a todas estas personas que ha excluido de las ayudas". "Además, ahora, nos encontramos con que tampoco está distribuyendo las tarjetas tal y como se había comprometido, desentendiéndose de todo", ha concluido.
