PALMA DE MALLORCA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente segundo y conseller de Participación Ciudadana y Presidencia, Jesús Jurado, y el director insular de Relaciones Institucionales y Presidencia, Marco A. Herrera, han visitado este martes las obras de restauración del tejado de la 'tafona' -almazara- de la finca la finca Raixa, una actuación "muy necesaria que permitirá reabrir este espacio a las visitas y recuperar parte del patrimonio".
Desde hace unos años este espacio permanece cerrado al público por motivos de seguridad para el estado de la cubierta. De hecho, justo después de comprar la finca en 2002, ya se planteó un proyecto para mejorar el tejado, según ha explicado la institución insular en un comunicado.
Asimismo, a mediados de marzo de 2018 comenzaron las obras de sustitución de la cubierta de la almazara de Raixa, aprobadas por unos 165.117 euros y que, finalmente, se han adjudicado por 121.500 euros. Estas tareas tendrán un plazo de ejecución de aproximadamente tres meses.
Las obras de mejora han comenzado con la retirada de las tejas para evaluar su estado y poder volver a utilizar las mismas. Asimismo, en breve se dispondrá de autorización para retirar la uralita presente en buena parte de la cubierta y, una vez destapada, se pondrán las vigas nuevas y la cubierta se cubrirá con tejas.
La recuperación de la cubierta de la almazara y, en el futuro, del espacio y de los elementos interiores se convierte en un hito importante para el Departamento de Participación Ciudadana y Presidencia del Consell de Mallorca ya que son "elementos característicos de las fincas de montaña y mostradores de un modelo identificador de una economía rural basada en el aprovechamiento de los recursos naturales".
Con todo, el patrimonio etnológico asociado al cultivo del olivo supone uno de los elementos definidores del paisaje cultural de la Serra de Tramuntana.
La almazara es un espacio cercano a las casas donde se elaboraba aceite, elemento básico de la economía rural mallorquina hasta hace unas pocas décadas. Se accede a través de una rampa que era útil para los animales que trabajaban en el proceso de prensado de la aceituna.
Por último, la tienda de aceite, complementaria a la almazara, tiene un acceso directo desde el patio principal y se ubica en la planta baja de la crujía del norte. En este espacio, con techo de bóveda de cañón, se guardaba el aceite.
