Innova.- La Bahía de Pollença acogerá este fin de semana las primeras pruebas de un sistema suspensor de risagas

Actualizado: viernes, 23 noviembre 2007 16:55

Iscomar colabora en este proyecto, que pretende minimizar las inundaciones costeras en puertos como el de Ciutadella

PALMA DE MALLORCA, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Bahía de Pollença (Mallorca) acogerá durante este fin de semana las primeras pruebas de un sistema suspensor de risagas, cuya efectividad se podrá conocer antes de las próximas Navidades, para una posterior utilización o la realización de nuevas pruebas, en lugares directamente afectados, como podría ser el Puerto de Ciutadella (Menorca).

Según informó la compañía naviera Iscomar, que colabora en las pruebas de campo del sistema suspensor de risagas, que se desarrollarán durante un mes a unas 0,1 millas al sudoeste de Punta Avanzada, el mecanismo no produce consumo energético, alguno lo que no perjudica al entorno marino donde se instala.

El sistema fue inventado Sebastián Bendito Vallori, quien además coordina el desarrollo del mismo, y las pruebas consistirán en instalar sobre el fondo marino próximo a Punta Avanzada de un tubo estanco de neopreno de volumen variable, relleno de gas a la misma presión que el medio submarino envolvente, especificó Iscomar.

Este dispositivo se conecta a un contenedor rígido que está flotando sobre la superficie colindante y, mientras la mar se halle en calma el citado dispositivo permanece invariable. Pero cuando llega una ola se produce el aumento proporcional de la presión aplicada por la columna de agua.

Debido a ello, se induce la compresión del volumen del gas contenido en el seno del mecanismo y, a continuación, la disminución directamente proporcional de la cantidad de agua desalojada por él. Como consecuencia, igual cantidad de agua pasa a ocupar el espacio gaseoso comprimido produciéndose un descenso idéntico en la altura de la ola, con lo cual, queda amortiguada evitando los efectos de la risaga.

Para medir la efectividad de la prueba se ha instalado un mástil guía fijo y rígido, milimetrado expresamente en altura para la lectura de datos, dos cámaras de video flotantes, una situada antes del dispositivo y de la llegada de la ola, para saber la altura, y otra después del mismo, para conocer la altura de salida de la misma y la efectividad de suspensión del dispositivo sobre aquella.

PROBLEMA ANUAL

Cabe señalar que las risagas se han convertido en un problema cada año en las conexiones marítimas entre Mallorca y Menorca, concretamente en el puerto de Ciutadella, ocasionando graves daños materiales en tierra y de servicio a navieras como Iscomar, que posibilitan la conexión interinsular todo el año.

También colaboran en el proyecto del suspensor de risagas entidades como la Fundación del Real Mallorca, la Fundación Respiralia, Marina de Donaire y la empresa especializada ZCO.