Los jóvenes de Baleares deberían ganar más de 4.000 euros para poder comprar una vivienda

Actualizado: viernes, 27 marzo 2009 15:03

Los hombres destinan el 108% de su salario al pago de la primera cuota de la hipoteca, las mujeres el 106%, y las mensualidades se sitúan en el 87,6% según el Consell de la Joventut

PALMA DE MALLORCA, 27 Mar. (EUROPA PRESS) -

Los jóvenes de las Illes Balears deberían ganar más de 4.000 euros para poder comprar una vivienda de primera mano, muy por encima de los 3.500 euros de la media española, según estimaciones realizadas por el Observatorio de la Vivienda del Consejo de la Juventud (Objovi), que se basa en el ratio del 30 por ciento de los ingresos que debe suponer, como máximo, el pago mensual por la residencia, indiferentemente de si es adquirida o alquilada.

Así lo dio a conocer hoy, en el encuentro con los medios de comunicación que mantuvo el presidente de esta entidad en las islas, Rafel Sedano, junto con vocal de participación estatal, Javier Igareda, y el sociólogo responsable del Objovi, Joffre López, quienes expusieron los resultados del seguimiento que realiza el observatorio correspondientes al tercer trimestre de 2008, que señalan, además, un repunte del paro en ese colectivo, que abarca hasta los 34 años de edad.

Concretamente, entre julio y septiembre del año pasado, se disparó el desempleo juvenil un 158%, con 20.000 parados más en esa franja de edad, a pesar de que se trata de una época del año en la que la ocupación alcanza tradicionalmente sus cotas más altas en Baleares. De hecho, alrededor del 62 por ciento de los residentes en las islas dentro de esa franja de edad se encontraban en situación de desempleo en aquel periodo; mientras que la tendencia no ha hecho más que acrecentarse desde entonces.

Aunque cada vez es más difícil acceder a la vivienda, por el incremento del desempleo y por el endurecimiento de las condiciones de las entidades bancarias para conceder créditos, el Consejo de la Juventud constató que los hombres jóvenes que ya lo hicieron destinan el 108% de su salario a pagar la primera cuota de la hipoteca y las mujeres el 116%; las siguientes mensualidades, durante los 30 o más años fijados para la devolución del préstamo, suponen un impacto del 87,6% de la nómina media.

Los tres representantes del Consell de la Joventut coincidieron en considerar que se trata de un "problema muy grave", ya que, en proporción, los ingresos de los jóvenes deberían ascender a los 4.000 euros para poder asumir los pagos holgadamente, una nómina "imposible" para la práctica totalidad de esa población. Y, además, tampoco mejora la situación en el caso del alquiler, que supone una media de 630 euros al mes para todo el Estado.

Por localidades, ese porcentaje se eleva hasta el 115 por ciento en Palma y, en Ciutadella, al 130%, muy alejados de la media nacional del 87% y sólo superados por el País Vasco; una Comunidad Autónoma que, por otra parte, cuenta con políticas de vivienda pública mucho más desarrolladas que Baleares, recordó Sedano. Y, a todo ello, aún agregó que en las islas, que es la Comunidad en la que se emancipan antes los residentes, hay unos 70.000 hogares jóvenes sin ingresos económico externo.

MÁS VPO Y MÁS AYUDAS

El Consell de la Joventut quiso también realizar propuestas y, en ese sentido, planteó que el Govern sea "propietario" de las viviendas que impulse y que marque su precio, en lugar de cederlas a empresas privadas. Y, a este respecto, recordó que, en el Norte de Europa, los Estados llegan a tener en propiedad hasta el 40 por ciento de las residencias, frente al 3% de la media española, en la que se integra la Comunidad balear.

"Sí el Govern tiene un parque de viviendas propio, puede controlar más su precio final en el mercado", aclaró Rafel Sedano, quien apuntó que en la actualidad se dan casos de residencias más baratas en la oferta privada que en la pública. Y, por otra parte, aunque "felicitó" al Gobierno central por las ayudas de 210 euros al mes para jóvenes, señaló que "deberían ser proporcionales", porque no tienen la misma repercusión sobre las rentas que se cobran en las distintas autonomías.