PALMA DE MALLORCA 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
El sindicato UGT reclamó hoy un gran pacto entre las fuerzas políticas y los agentes económicos y sociales para frenar la evolución negativa que ha sufrido el mercado laboral balear en los últimos meses y que se confirma con el aumento de parados en el mes de julio, tanto con respecto al mismo periodo de año pasado (+8,92%) como en relación al mes anterior (+5,85%).
En declaraciones a Europa Press, el secretario de Acción Sindical de UGT en las Islas, Manuel Pelarda, lamentó estas cifras negativas pese a que el mes de julio pertenece a la temporada alta turística, mientras que junio es temporada media. En su opinión, los datos confirman la advertencia que los sindicatos venían haciendo, "la buena marcha del sector turístico ha sido un espejismo. Al final, la realidad es muy tozuda y siempre prevalece sobre la mentira".
"El empleo va de mal en peor. Hay que remitirse a tres o cuatro años atrás para encontrar unas cifras similares. Lo más preocupante es que es una tendencia generalizada, que afecta de lleno a todos los sectores y tanto a mujeres como a hombres", afirmó, señalando al mismo tiempo la necesidad de que el Govern balear realice un diagnóstico del problema.
Refiriéndose al sector de la construcción, el que registra un mayor incremento de parados (1.414 desempleados más que el mes pasado), el sindicalista apuntó como causa la finalización de muchas de las obras públicas iniciadas por el anterior Ejecutivo. "Ya avisamos y ahora se confirma", dijo.
Para Pelarda, ante semejante panorama, el Ejecutivo balear debe reunir a las distintas fuerzas políticas y a los agentes sociales para, tras un diagnóstico previo, tomar medidas encaminadas a corregir los desequilibrios creados por "una economía pensada para cuatro años", en referencia a la anterior legislatura del Govern del PP.
"Necesitamos un plan estratégico para poner en marcha un modelo que garantice la estabilidad del mercado laboral de las islas a medio y largo plazo. Hay que poner solución al actual desbarajuste económico, consecuencia de un crecimiento anárquico. El del PP ha sido un modelo beneficioso a corto plazo pero que ahora está teniendo consecuencias negativas a pesar de que el ritmo de crecimiento es bueno, con una evolución del PIB cercana al 3 por ciento anual. La economía no puede depender de factores no controlables", opinó.
Finalmente, llamó la atención sobre el hecho de que el colectivo de trabajadores inmigrantes es el que ha sufrido el mayor "varapalo", ya que se la cifra de demandantes de empleo registra un incremento interanual superior al 40 por ciento, cuando su peso poblacional es de apenas un 17 por ciento.