Los acontecimientos de los últimos meses han provocado 10.000 desplazados en Ucrania, según ACNUR

MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -

Los acontecimientos que se han producido en los últimos meses en Ucrania, con la caída del presidente Viktor Yanukovich, la secesión de Crimea y los referendos de autodeterminación en las regiones del este del país, entre otros hechos, han provocado unos 10.000 desplazados dentro del país, según ha informado este martes el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR).

"Recientemente se ha completado una evaluación de necesidades y estamos trabajando estrechamente con las autoridades locales, otras agencias de la ONU y ONG para ayudar a los más afectados", ha explicado el portavoz de ACNUR, Adrian Edwards.

"Hasta ahora, esto incluye prestar asistencia legal, préstamos de integración para 150 familias, asistencia en efectivo para 2.000 personas, y mejorar el alojamiento para 50 familias", ha precisado, según ha informado ACNUR en un comunicado.

Según el portavoz, los desplazamientos empezaron antes del referéndum en Crimea el 16 de abril y que culminó en su anexión a Rusia y se han incrementado de forma gradual desde entonces. ACNUR está realizando el recuento en base a los datos que recibe de las autoridades locales.

Entre los afectados, según la agencia de la ONU, hay personas que se han visto desplazadas dos veces, primero en Crimea y luego de nuevo en el este del país. En su mayoría, ha precisado, se trata de tártaros, aunque las autoridades locales también han informado de un reciente aumento en los registros de ucranianos, rusos y familias mixtas.

UN TERCIO SON NIÑOS

En otro orden de cosas, Edwards ha subrayado que al menos un tercio de los desplazados son niños y el 45 por ciento de las familias desplazadas se han dirigido hacia el centro del país, mientras que el 26 por ciento se han trasladado al oeste, si bien también hay desplazados en el sur y el este.

Los desplazados han explicado que han abandonado sus hogares "por amenazas directas o por miedo a la inseguridad o la persecución", ha precisado el portavoz. "Algunos aseguran haber recibido amenazas personales por teléfono, a través de las redes sociales o haber encontrado mensajes amenazadores en sus propiedades", ha añadido.

Muchos de ellos hablan de "miedo a la persecución por su etnia o creencia religiosa o, en el caso de periodistas, activistas de Derechos Humanos e intelectuales, por sus actividades o profesiones. Otros dicen que no podían mantener sus negocios abiertos", ha explicado.

Todas estas personas están recibiendo ayuda principalmente de las autoridades regionales y las organizaciones locales y están siendo acomodadas en instalaciones públicas o en propiedades privadas como hoteles. Algunos han encontrado refugio en casa particulares.

En este sentido, Edwards ha advertido de que "la capacidad de las comunidades de acogida se está agotando rápidamente". Así, ha incidido en que hacen falta "alojamientos permanentes, más oportunidades de trabajo, y apoyo para las organizaciones locales para desarrollar soluciones a largo plazo para los desplazados internos".

Leer más acerca de: