NICOSIA, 24 Ene. (Reuters/EP) -
Dos exministros chipriotas han sido imputados este martes por homicidio y negligencia por su presunta responsabilidad en la explosión de un almacén de municiones que causó en julio del año pasado 13 víctimas mortales, el mayor desastre ocurrido en la isla en tiempos de paz.
Las autoridades consideran al antiguo ministro de Exteriores Marcos Kyprianou y al que fuese responsable de Finanzas Costas Papacostas, junto a otras cinco personas, responsables de la deflagración iniciada en una base naval donde se almacenaban desde hacía más de dos años municiones incautadas a Irán. El incidente provocó graves daños en la principal central eléctrica del país.
Papacostas y Kyprianou fueron citados este martes por la Policía para la lectura de cargos y, en declaraciones a la televisión estatal, ambos han explicado que no cometieron ningún delito. "Creo que no hicimos nada mal, por lo que he negado los cargos", ha dicho en este sentido el exministro de Exteriores.
La Policía ha confirmado la presentación de los cargos, aunque no ha aclarado contra qué personas. Ahora corresponde a un juez dictar una imputación definitiva.
Chipre localizó en 2009 un buque con armas que navegaba desde Irán a Siria y que violaba el embargo impuesto por Naciones Unidas. Las autoridades se incautaron de las municiones a bordo y las almacenaron en una zona con altas temperaturas, algo que se conoció tras la explosión, cuando también salió a la luz pública que varios oficiales militares habían alertado de los riesgos.
Un investigador independiente designado por el Gobierno atribuyó parte de la responsabilidad del desastre al presidente chipriota, Demetris Christofias, aunque el mandatario ha negado cualquier vínculo y las autoridades han admitido que carecen de pruebas suficientes para procesarle. Según la investigación, el Gobierno de Christofias incumplió las medidas de seguridad al almacenar el armamento en lugar de deshacerse de él, aparentemente con el objetivo último de no molestar al Gobierno de Siria.
