MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Defensa, José Antonio Alonso, confirmó hoy la detención del presunto "organizador" del atentado que costó la vida en Afganistán el pasado 21 de febrero a la soldado española Idoia Rodríguez, Hajji Said Ahmad. La detención se produjo el pasado 25 de marzo en la provincia afgana de Herat.
En rueda de prensa, el ministro apuntó que de acuerdo con la información que la policía antiterrorista afgana ha ido remitiendo a las autoridades españolas a través de la Embajada, el pasado 25 de marzo fueron detenidos "tres talibanes en un control de carreteras en la provincia de Herat".
"A raíz de estas detenciones y de las investigaciones que puso en marcha el departamento de lucha antiterrorista de la policía afgana, la información que nos trasladan ahora es que uno de los detenidos es el organizador de gran parte de los atentados que se han registrado últimamente en las provincias de Herat y Farah contra tropas de la coalición internacional y contra el propio ejército afgano. Entre esos atentados está el que le costó la vida a la soldado Idoia Rodríguez el pasado 21 de febrero", explicó.
Alonso señaló que esta persona es Hajji Said Ahmad, quien sería el "organizador y dirigente responsable de la célula terrorista que cometió un importante número de atentados contra autoridades civiles y soldados de la coalición internacional". Según dijo, se trata de un "personaje clave en el esquema de la insurgencia de la zona oeste del país", por lo que calificó la detención de "buena noticia".
Asimismo, apuntó que la única participación española en la operación fue la del traslado a Kabul de los tres detenidos después de su detención el pasado mes de marzo, "cuando lo único que había eran sospechas". "Ahora las autoridades tienen algo más que una sospecha, tienen algún nivel de certeza", añadió.
El ministro, aseguró que esto demuestra que "a pesar de las dificultades Afganistán puede, poco a poco, reconstruir sus instituciones y recuperar la estabilidad, y por eso sigue necesitando ayuda".
Finalmente, resaltó que esto es responsabilidad de la policía y del sistema judicial afgano, pero expresó su deseo de que el asunto sea "manejado como corresponde a un Estado de Derecho, que a estas personas se las juzgue con garantías y se las exija las responsabilidades racionales que son coherentes con las normas de un Estado de Derecho, que es lo que se quiere construir en Afganistán".
