BAGRAM (AFGANISTÁN), 17 (EP/AP)
Los ataques en la frontera entre Afganistán y Pakistán han descendido en más del 40 por ciento desde julio, según el general del Ejército norteamericano Joseph Votel, quien señaló que la disminución de la actividad insurgente podría deberse a la llegada del invierno, al aumento de ataques en Pakistán y a un incremento de la comunicación y coordinación entre las fuerzas de la OTAN, y los Ejércitos afgano y paquistaní.
El nuevo informe publicado por el Centro para la Estrategia y los Estudios Internacionales sobre la situación en la frontera señalaba que la misión internacional no está mejorando y que Afganistán se está convirtiendo en una zona inestable. El número de muertes desde la invasión de la coalición liderada por Estados Unidos en 2001 alcanza la cifra de 6.300 a causa de la violencia, según datos de la agencia AP basada en informaciones oficiales. Los informes aluden también a que durante este año se ha batido el récord de ataques suicidas, llegando a 140.
A pesar de estos informes, Votel subrayó ayer que la misión internacional está haciendo progresos. "No estoy de acuerdo en que nos estemos moviendo en una dirección negativa", declaró el general a los periodistas desde la principal base estadounidense en Bagram. "Creo que estamos progresando. Este es un objetivo a largo plazo y aún hay un largo camino que recorrer en seguridad y desarrollo, así como en otros aspectos aquí, pero estamos haciendo progresos y moviéndonos hacia adelante", añadió.
Según informes norteamericanos la seguridad se ha incrementado en 25 distritos en el este de Afganistán, supervisados por Estados Unidos, mientras que las actuaciones de gobierno han mejorado en doce distritos y los trabajos de desarrollo se han incrementado en 27. Volten afirmó que el Ejército norteamericano había capturado a más de 50 "líderes importantes" de los rebeldes en lo que va de año, acción que ha generado un vacío en el campo de batalla, aunque, a pesar de estas pérdidas, añadió, los insurgentes han demostrado mejoras en su efectividad.
Ayer, el periódico 'The New York Times' publicó que la Administración Bush estaba profundamente preocupado por los fallos en Afganistán y que Washington y la OTAN habían comenzado tres estudios sobre la misión en el país afgano.