KABUL 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno afgano anunció esta semana que había retirado la licencia a 1.600 ONG que no habían presentado su documentación correspondiente para volver a registrarse ante el Ministerio de Economía en el plazo previsto. La medida ha sido recibida con división de opiones por las ONG, según informa la agencia de noticias de la ONU IRIN.
El ministro de Economía, Mohamad Amin Farhang, anunció que se va a retirar la licencia a 1.620 ONG nacionales e internacionales ya que éstas no han vuelto a registrarse ante su Ministerio. "Sólo 464 ONG, incluidas 165 organizaciones internacionales, se han registrado ante el Ministerio de Economía, mientras que las solicitudes de otras 217 están siendo revisadas", señaló.
Según el ministro, muchas de las 2.350 ONG, entre ellas 330 extranjeras, que estaban registradas previamente en la anterior lista del Ministerio ya no están operativas. Las autoridades dieron un plazo de seis meses para volver a registrarse en julio pasado, que expiró el lunes, tras haber sido prorrogado.
Los grupos cívicos afganos han expresado divergencia de opiniones respecto a la decisión del Gobierno. Algunos grupos se han quejado de que no se les ha dado tiempo suficiente ni apoyo para superar el proceso de registro. "El Gobierno no ha sido capaz de procesar realmente y facilitar el proceso de registro para las ONG", declaró Aziz Rafiee, director gerente del Foro de la Sociead Civil Afgano (ACSF), una ONG local que reúne a unas 75 organizaciones.
Sin embargo, la directora de la Agencia Coordinadora para la Ayuda Afgana (ACBAR), Anja de Beer, dijo que considera este proceso "como un medio para limpiar la lista de ONG", en la que considera que hay muchas ONG que no son realmente tales. "En cierto modo es un buen paso para limpiar la lista y entonces tener una mejor visión sobre las que están registradas; como tal, no consideramos que sea negativo", añadió la responsable de esta organización que representa a 90 ONG tanto nacionales como internacionales.
"Algunas ONG se han registrado como ONG con la esperanza de recoger fondos y la gran mayoría de ellas nunca se quitaron de la lista y siguen figurando en ella", añadió, destacando que "no tienen nada más que una tarjeta de visita".
El Gobierno afgano se ha mostrado descontento en el pasado con el escaso control que tenía sobre los fondos de los países donantes, ya que las ONG recibían el grueso del dinero, en parte porque los donantes se mostraban reacios a canalizar los fondos a través de un gobierno joven, por su falta de capacidad y las sospechas de corrupción. "Durante los cuatro últimos años, el Gobierno sólo ha estado recibiendo el 22% de la ayuda mundial y el 78% restante era distribuido a través de las ONG, pero ahora el Gobierno recibirá directamente más del 60% de las donaciones internacionales", subrayó el portavoz del Ministerio de Economía, Aziz Shams, citado por IRIN. Durane la conferencia de donantes celebrada en Londres la semana pasada los países donantes prometieron 10.500 millones de dólares para la rehabilitación y la reconstrucción del país.