KABUL, 14 Sep. (EUROPA PRESS) -
Al menos 33 insurgentes han muerto en las últimas horas en distintos enfrentamientos con la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF), la misión de la OTAN en Afganistán. Un total de 23 insurgentes murieron en tres enfrentamientos que siguieron a otros tantos ataques contra una patrulla de ISAF en la provincia de Helmand (en el sureste de Afganistán), y otros 10 fueron abatidos en un combate de cinco horas en la provincia de Kapisa (noroeste) con las fuerzas afganas y de la ISAF.
En Helmand, las tropas afganas y de la coalición mataron a 14 insurgentes utilizando armas pequeñas, armas automáticas, morteros y cohetes en el primer enfrentamiento. Otros cinco fueron abatidos en el segundo enfrentamiento, y en el tercero, que incluyó un bombardeo aéreo, murieron cinco más, según la ISAF, que no ha comunicado bajas entre sus filas o las filas afganas.
Los enfrentamientos en Kapisa estallaron después de que los insurgentes lanzaran una emboscada contra un convoy de las fuerzas afganas y de la ISAF, según informó ésta última, que tampoco comunicó bajas entre sus filas o las filas afganas en este incidente. Por otro lado, las tropas afganas y de la ISAF abatieron a tres insurgentes en la provincia de Wardak, al este de Kabul, según un comunicado de la ISAF.
El nuevo jefe de Policía de la provincia de Kunduz (norte) sobrevivió a una emboscada de los talibán en la vecina provincia de Baghlan, según las autoridades afganas. Un candidato a las elecciones parlamentarias del próximo 18 de septiembre también sobrevivió a un ataque en la provincia de Ghazni, al suroeste de Kabul, informó el lunes la Policía.
