AI denuncia las "pésimas" condiciones que padecen los refugiados detenidos en Lesbos y Quíos

Inmigrantes y refugiados en el centro de internamiento de Moria, en Lesbos
GIORGOS MOUTAFIS / REUTERS
Actualizado: jueves, 7 abril 2016 19:36

Asegura que los centros de "detención" de las dos islas no cumplen las condiciones para alojar a niños y personas con discapacidades

MADRID, 7 Abr. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional ha denunciado este jueves las "pésimas" condiciones que padecen los refugiados e inmigrantes que están "detenidos de forma arbitraria" en los centros de recepción de las islas griegas de Lesbos y Quíos.

Tras haber logrado acceder a estos dos centros de detención "altamente restringidos", la ONG ha dejado claro que las condiciones que sufren los refugiados e inmigrantes son "pésimas" y ha advertido de que crecen "la incertidumbre, el miedo y la desesperación" por la perspectiva de la aplicación del acuerdo de devolución pactado entre la Unión Europea y Turquía.

Amnistía ha contado que uno de sus equipos de investigación visitó los centros de detención de Moria en Lesbos y VIAL en Quíos, en los que permanecen detenidas "unas 4.200 personas", de los cuales la mayoría llegaron a las islas griegas tras el acuerdo de la Unión Europea con Turquía del 20 de marzo.

Entre los 89 refugiados que AI ha entrevistado, "había un amplio número de personas especialmente vulnerables, incluidas mujeres embarazadas, bebés, niños pequeños y personas con discapacidades, traumas y enfermedades graves".

"En el filo de Europa, los refugiados están atrapados sin luz al final del túnel. Una organización que es tan imperfecta, precipitada y mal preparada que está abocada a los errores, el pisoteo de los derechos y el bienestar de algunas de las personas más vulnerables de Europa", ha afirmado la subdirectora para Europa de AI, Gauri van Gulik.

"Las personas detenidas en Lesbos y Quíos están virtualmente sin acceso a apoyo legal, con acceso limitado a los servicios y el apoyo y sin casi información sobre su situación actual y su posible destino. El miedo y la desesperación son palpables", ha subrayado.

"Escapé de Siria para evitar la cárcel pero ahora estoy en una prisión", ha asegurado un hombre de unos 20 años, en una entrevista con AI en el centro de detención de Moria. AI ha advertido de que la decisión de pasar de los centros de recepción abierta a los campos de detención para mantener encerrados a los que cruzan el mar Egeo desde Turquía ha dejado a "miles de personas detenidas de forma arbitraria, en algunos casos durante semanas, mientras esperan noticias de sus solicitudes de asilo y su futuro".

La ONG ha asegurado que el Ejército griego y la Policía ejercen un "estricto control" en el centro de detención de Moria sobre todos aquellos que entran y salen de las instalaciones. "El campamento, que ahora alberga a unas 3.150 personas, está cerrado al mundo exterior con varias vallas con concertinas", ha relatado Amnistía.

En el caso del centro de detención VIAL en Quíos, levantado en una antigua fábrica de aluminio, el acceso también está muy controlado. "Las preocupaciones por la seguridad continúan tras los duros enfrentamientos registrados entre personas de diferentes nacionalidades dentro del campamento en la noche del 1 de abril, lo que llevó a más de 400 refugiados e inmigrantes a huir", ha asegurado la ONG.

LAS DETENCIONES AUTOMÁTICAS Y COLECTIVAS SON "ILEGALES"

La mayoría de los que huyeron duermen ahora al raso o cerca del principal puerto de Quíos, con "poca seguridad" y escaso acceso a servicios básicos, según Amnistía. De los refugiados e inmigrantes entrevistados, la ONG ha dicho que solo dos de ellos pudieron mostrarle sus órdenes de detención "basadas en sus circunstancias individuales" y ha denunciado que las detenciones "automáticas y de grupo" son "por definición" arbitrarias y, por tanto, "ilegales".

Además, ha asegurado que la "detención automática" de todos los que llegan a las isla griegas provoca "fallos" a la hora de afrontar las "especiales circunstancias y necesidades" de los solicitantes de asilo, incluidos las víctimas de "torturas", las familias con niños pequeños y bebés, las mujeres que viajan solas con niños, las personas con discapacidades, las que necesitan atención médica urgente, las embarazadas y aquellos que precisan atención psicológica. "Los niños no deberían estar nunca en centros de detención de inmigrantes", ha advertido.

"Amnistía Internacional ha visto y ha hablado con muchas personas en Moria y en VIAL que están en régimen de detención cuando está claro que no deberían estarlo", ha asegurado. En este contexto, ha afirmado que las autoridades de Moria le han transmitido que la identificación de las personas vulnerables es una "prioridad" y que entre 50 y 100 personas han sido liberadas y enviadas a centros abiertos aunque todavía quedan "un amplio número en el interior".

En el caso de VIAL, la ONG ha señalado que la primera familia con la que habló llegó el 19 de marzo y tiene una niña palestina-siria de seis años con un grave lesión de espalda provocada por un techo que se le cayó encima tras un bombardeo. "Nos mostró su espalda herida y los documentos médicos de Siria", ha añadido.

"Ningún solicitante de asilo debería ser detenido de forma automática y estos centros de detención en Lesbos y Quíos no son en modo alguno aptos para niños, personas con discapacidades o personas con necesidades médicas urgentes. Deben ser liberados de inmediato", ha reclamado Van Gulik.