BERLIN 10 Nov. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, Rosa Aranda) -
El Estado alemán y el Gobierno del estado federado de Baviera quieren aumentar los fondos para la financiación del tren magnético de alta velocidad 'Transrapid' en Munich, con el fin de que el proyecto pueda por fin materializarse, informaron el ministro alemán de Transportes, Wolfgang Tiefensee, y su homólogo en Baviera, Edwin Huber.
El objetivo es que el famoso tren de suspensión magnética que va desde la estación central de Munich, capital bávara, hasta el aeropuerto de la misma ciudad, vea la luz lo antes posible.
Baviera, estado federado en el Sur de Alemania, pretende aumentar su dotación para este trayecto hasta los 300 millones de euros (frente a los 185 millones que destina a ese fin en la actualidad).
El Estado alemán contribuye a este proyecto tecnológico con 550 millones, pero Tiefensee transmitió el convencimiento de que el Gobierno de Alemania debe aportar más dinero a esta obra de alta tecnología.
El coste total del 'Transrapid' es de 1.850 millones de euros, y según la legislación alemana, el Gobierno germano sólo puede financiar, como mucho, la mitad de esos costes. Deutsche Bahn, la compañía de trenes alemana, ha anunciado que se comprometerá a este proyecto con 185 millones de euros.
El tren de alta velocidad 'Transrapid' es un proyecto de la multinacional alemana Siemens y del grupo tecnológico ThyssenKrupp. Ambas empresas han recibido la noticia con mucho optimismo, pues gracias al aumento del capital que inviertan el Gobierno alemán y bávaro, uno de los proyectos alemanes más ambiciosos de las últimas décadas podrá hacerse realidad con más celeridad.
Tanto Siemens como ThyssenKrupp se habían declarado incapaces de aumentar su financiación en el tramo del 'Transrapid' en Munich. La dirección de ThyssenKrupp, incluso, indicó hace dos meses que vendería la tecnología a China si a mediados de 2007 no se había tomado un decisión con respecto al tramo del tren de alta velocidad en la capital bávara. Por el momento, solamente en Shangai el 'Transrapid' funciona de forma ordinaria.
El pasado mes de septiembre un accidente sufrido en la localidad de Emsland (en el estado federado de Baja Sajonia) por el famoso tren de suspensión magnética deterioró la buena fama que tenía en Alemania. Más de veinte personas de las treinta involucradas en el siniestro fallecieron y el resto de viajeros resultó herido.
Todo sucedió cuando un 'Transrapid' sin conductor colisionó con un tren técnico cuando viajaba a una velocidad de 200 kilómetros por hora, (aunque su capacidad máxima puede alcanzar los 450 kilómetros) en un trayecto ferroviario de prueba de 31,8 kilómetros en el que normalmente viajan turistas.