ARGEL, 10 Jun. (Reuters/EP) -
Ahmed Ouyahia, director del gabinete del presidente de Argelia, Abdelaziz Buteflika, ha sido nombrado este miércoles líder de uno de los partidos de la coalición gobernante, lo que confirma su posición de posible sucesor presidencial.
Los rumores sobre la salud de Buteflika desde que sufrió un derrame cerebral hace dos años están alimentando el debate sobre quién podría reemplazar al veterano, que lleva en el cargo desde 1999.
Algunos analistas han explicado que con más de 20 años de experiencia en la política argelina, que incluyen varios mandatos como primer ministro, Ouyahia es uno de los candidatos con más posibilidades para suceder al actual presidente.
"Ouyahia es un hombre de Estado. Podría ser el próximo presidente de Argelia", ha afirmado a la agencia Reuters el analista político, Farid Ferrahi. "Aunque la lista también está abierta para otros candidatos", ha agregado.
El partido RND de Ouyahia forma parte de la coalición gobernante junto al Frente de Liberación Nacional (FLN), el movimiento nacionalista que domina la esfera política del país desde que obtuvo su independencia en 1962.
Las fuentes consultadas han señalado que esta breve lista incluye al primer ministro, Abdelmalek Sellal, quien se ha unido recientemente al FLN para aumentar los apoyos a su candidatura. Asimismo otro aspirante podría ser el veterano diplomático Lajdar Brahimi, que se ha reunido con Buteflika en diversas ocasiones durante los dos últimos años. Encuentros que han aumentado todavía más las especulaciones políticas.
VITALES INGRESOS ENERGÉTICOS
Argelia es un aliado clave de Estados Unidos en la lucha contra milicias islamistas en la región e importante suministrador energético de Europa. El país fue sacudido por una guerra civil en la década de los 90 después de que las elecciones se cancelasen tras el aparente triunfo de un partido islamista.
El país se encuentra en un complicado momento desde que un derrumbe de los precios del petróleo redujese los ingresos energéticos, que componen el 95 por ciento de sus exportaciones y más de la mitad del presupuesto estatal.
Sin embargo los ingresos energéticos han sido invertidos en importantes mejoras en el sistema de seguridad argelino, viviendas de protección oficial, alimentos básicos, créditos baratos y combustible.
