RIAD 31 Ene. (EP/AP) -
El Gobierno de Arabia Saudí ejecutó hoy a un paquistaní acusado de contrabando de heroína y a dos saudíes acusados de robar un banco y asesinar a un extranjero, informó la agencia oficial saudí.
El paquistaní, Janzadah Abdul Qayoum, había escondido las drogas "en su cuerpo", presumiblemente enrollando la heroína en plástico y tragándoselo, informó el Ministerio del Interior. Fue decapitado en Riad.
Los dos saudíes ejecutados, Salamah Bin Marzouk y Samir Bin Jazaa, habían sido acusados de robar un banco en La Meca y después matar a un egipcio, que enterraron en el desierto, señala el informe de Interior.
El Ministerio afirmó que estos dos hombre cometieron otros robos, haciéndose pasar por guardias de seguridad y llevaban drogas y alcohol. Fueron decapitados en Medina.
Arabia Saudí se rige por una estricta interpretación del Islam, según la cual la gente puede ser acusada de asesinato, tráfico de drogas, violación y robo armado, y pueden ser ejecutados, que se llevan a cabo en público y con una espada.
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