MADRID, 1 Ene. (EUROPA PRESS) -
Al menos 417 personas han muerto y alrededor de 2.000 han resultado heridos, 250 de ellos de gravedad, desde el pasado sábado, cuando comenzaron los bombardeos israelíes sobre la Franja de Gaza, según informó el director de los Servicios de Ambulancias y Emergencias del Gobierno 'de facto' de Hamás, Muawiya Hassanein, citado por la agencia palestina de noticias Maan.
Por una parte, seis personas murieron y al menos 30 resultaron heridas como consecuencia de los bombardeos sobre casas, parques, edificios del Gobierno y túneles en Rafá, en el sur de la Franja de Gaza.
Asimismo, un alto dirigente político del Movimiento para la Resistencia Islámica (Hamás), Nizar Rayyan, de 49 años, murió hoy junto a nueve miembros de su familia después de que la aviación israelí bombardease su casa en Jabalia, en el norte, según Maan.
Rayyan, profesor de la Universidad Islámica de Gaza y el más importante dirigente de Hamás muerto durante los seis días de bombardeos efectuados por Israel, era abiertamente partidario de reanudar los atentados suicidas contra el Estado judío. Según la radio de Hamás, Rayyan se había negado a abandonar su casa, pese a lo que le había aconsejado el movimiento. Hamás ha jurado que Israel pagará "un alto precio" por su muerte.
La aviación israelí lanzó esta mañana misiles contra dos viviendas en el densamente poblado campamento de refugiados de An Nusseirat, donde se produjeron "decenas de heridos", según la agencia. Otras 20 personas resultaron heridas después de que los proyectiles israelíes alcanzaron la casa de Abu Musa Ad Diry, en el barrui de As Sabra, en la ciudad de Gaza.
Al menos cinco personas murieron esta madrugada después de que la aviación israelí atacase una casa en el barrio de Ash Shaboura, en Rafá y una sexta persona murió durante otro bombardeo en el sur. Asimismo, una mujer, Fatima Balusha, falleció después de que una bomba impactara contra una mezquita próxima a su casa en Jabalia. Otra persona murió y varios edificios del Gobierno quedaron destruidos después de una breve incursión terrestre de las tropas israelíes al este de la ciudad de Gaza.
Esta mañana, el primer ministro de Israel, Ehud Olmert, había asegurado que el Ejército seguiría combatiendo a Hamás con "puño de acero", en respuesta a los cohetes lanzados desde la Franja de Gaza contra el sur de Israel, que han causado cuatro muertos desde el pasado fin de semana.
