MADRID, 19 Ene. (EUROPA PRESS) -
La manifestación antigubernamental celebrada este viernes en la capital de Bahréin, Manama, se ha saldado con varios heridos y decenas de detenidos tras la intervención de las fuerzas de seguridad para disolverla, después de que el Gobierno declarara "ilegal" la protesta, según ha informado el diario libanés 'Al Akhbar'.
Las fuerzas de seguridad han lanzado granadas aturdidoras y gases lacrimógenos y han hecho uso de gas pimienta para disolver a los presentes, según activistas. En varios vídeos publicados en YouTube, los manifestantes se alejan de las calles en medio de una densa nube de gases lacrimógenos mientras corean cánticos contra el Gobierno.
Una de las fotos publicadas a través de Twitter muestra a una joven herida por las fuerzas de seguridad al ser detenida, con la boca con restos de sangre. Además, aparece sin pañuelo y con la cara rociada por gas pimienta.
En los últimos meses, las autoridades del país han negado el permiso a cientos de peticiones de manifestación presentadas por el partido Wefaq. En todos los casos han alegado motivos de seguridad y han hecho referencia a la ley sobre asambleas y manifestaciones para justificar su decisión.
Asimismo, el Gobierno de Bahréin ha argumentado en varias ocasiones que ya había dado permiso a numerosas manifestaciones durante este año, por lo que no veía motivos para seguir autorizándolas.
La manifestación, convocada por el Movimiento Joven 14 de Marzo, ha tenido lugar apenas un día después en que las autoridades han puesto en libertad bajo fianza al vicepresidente del Centro para los Derechos Humanos de Bahréin (BCHR), Said Yousif Al Muhafdha, detenido el pasado 17 de diciembre durante una manifestación de protesta antigubernamental en Manama.
Su abogado ha declarado que Al Muhafda fue arrestado el pasado diciembre mientras supervisaba la manifestación en Manama y ha añadido que el activista ya había sido investigado por publicar presuntamente mensajes falsos en Twitter.
A principios de este mes, la Justicia bahreiní confirmó las penas de cárcel contra trece líderes de manifestaciones antigubernamentales que se celebraron en 2011, tras dos años de juicios.
El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, ha lamentado profundamente esta decisión de la Justicia y ha calificado la sentencia como cruel.
El emirato, aliado de Estados Unidos y las monarquías del Golfo, ha reprimido violentamente durante los últimos dos años las protestas pro democráticas en el territorio. Manama impuso la ley marcial tras el estallido de las manifestaciones y solicitó la entrada de tropas saudíes y emiratíes para controlar las protestas y aplastar las manifestaciones.
La oposición ha denunciado las medidas violentas utilizadas por las fuerzas de seguridad y ha afirmado que han fallecido más de 80 personas desde el inicio de las protestas, la mayoría de ellas por gases lacrimógenos y atropellos de vehículos policiales.
Asimismo, desde el inicio de la represión de las autoridades contra los manifestantes, ONG internacionales como Amnistía Internacional (AI), Human Rights Watch (HRW) o Reporteros Sin Fronteras(RSF) han emitido múltiples comunicados para denunciar la situación de Derechos Humanos en el país y pedir a la comunidad internacional una postura activa de presión sobre el Ejecutivo.
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