BRUSELAS, 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades judiciales belgas mantienen en prisión preventiva a Abdallah Ait Oud, el principal sospechoso del secuestro en la localidad de Lieja de las niñas Stacy y Nathalie, y la violación de ésta última, el pasado 28 de junio, si bien aún no se conocen los resultados de las pruebas de ADN que podrían inculparlo definitivamente, al margen de los otros indicios que le apuntan como culpable de ambos delitos.
Según informaron medios locales, el acusado deberá comparecer antes de finales de este mes ante la Cámara del Consejo de Lieja, que posee la jurisdicción según el derecho belga para "determinar cada mes si aún se reúnen las condiciones para mantener al inculpado en detención preventiva".
Mientras tanto, el fiscal del Tribunal Supremo de Lieja, Visart de Bocarmé, desmintió que se conozcan ya los resultados de las pruebas del ADN de las niñas, como anunció el pasado lunes la cadena de televisión pública RTBF. Según las informaciones de este medio, las muestras tomadas de los cuerpos de Stacy y Nathalie no contendrían ningún resto de ADN "extraño".
Medios locales publicaron que, sin embargo, De Bocarmé, negó la veracidad de esas informaciones y añadió que "las informaciones aún no pueden ser confirmadas en este estadio de la investigación". En cualquier caso, los investigadores mostraron poca confianza en encontrar cualquier tipo de resto de ADN útil, ya que las niñas permanecieron tres semanas sumergidas bajo el agua tras su asesinato, hasta que fueron encontradas por la policía en un colector junto a las vías del tren.
En cualquier caso y mientras prosiguen las investigaciones, Ait Oud continúa en prisión preventiva, como principal sospechoso del caso pero sin que pese sobre él una acusación formal.
OTROS INDICIOS
Al margen del resultado final de las pruebas de ADN, la fiscalía de Lieja aseguró a la prensa local que "la acusación de Ait Oud no se basa en ese análisis" y que existen "fuertes indicios" que acusan al principal sospechoso. Sin embargo, el sospechoso continúa negando su culpabilidad.
El fiscal De Bocarmé recordó a los medios que las circunstancias de su detención fueron "raras", sobre todo en lo relativo a su desaparición durante tres días y a su intento de cambiar de aspecto "rapándose la cabeza" cuando descubrió que la policía lo buscaba.
Además, la acusación mencionó la existencia de un testigo que lo vio en las cercanías del colector de agua hacia las 5 de la mañana del día de autos, hora a la que la policía supone que los cuerpos fueron depositados allí. Otras pruebas de transferencia de fibras realizadas a mediados de julio probaron que restos de la ropa de Ait Oud fueron encontrados sobre la ropa de las niñas.
Por otra parte, el fiscal considera que, además de tener antecedentes penales por violación de menores, al parecer, otros cuatro niños y tres chicas jóvenes habrían sido abordados aquella misma noche por el sospechoso que, según medios locales, "quería llevarles a ver unas tortugas en el bosque".
Ahora Ait Oud se enfrenta a la acusación por el estrangulamiento de Stacy Lemmens, de 7 años, y de su hermanastra Nathalie Mahy, de 10 años, a la que también habría violado. Las niñas desaparecieron la noche del 9 al 10 de junio de una feria en un barrio desfavorecido de Lieja y sus cadáveres fueron encontradas tres semanas más tarde.
Estos hechos coinciden con el décimo aniversario de la detención de Marc Dutroux por el asesinato y violación de varios menores, lo que ha vuelto a despertar los recuerdos de aquellos hechos en toda Bélgica.
